04/11/2010 Los directores financieros españoles consideran insuficientes inadecuadas las medidas tomadas por el Ejecutivo en los ámbitos laboral, fiscal, financiero y de gasto público, según la encuesta semestral a la Dirección Financiera elaborada por la firma Deloitte.
En lo que se refiere al mercado laboral y la reforma del sistema financiero, los encuestados consideran que las medidas adoptadas son adecuadas, pero insuficientes, mientras que en materia fiscal y políticas de gasto público las medidas se consideran directamente inadecuadas.
Para todos estos ámbitos, los directores proponen medidas encaminadas a superar la actual crisis económica. En el ámbito laboral, se insiste en una mayor flexibilización del mercado, en la mejora de la formación y en la reforma del sistema educativo, mientras que en el ámbito fiscal abogan por la reducción de impuestos para aumentar la renta disponible y los flujos de caja, y que éstos se destinen a consumo, ahorro e inversión productiva para mejorar la liquidez del sistema y la financiación a empresas.
Directores muy pesimistas
Los directores financieros españoles mantienen su visión pesimista sobre la situación económica del país ya que el 84% considera que la situación que atraviesa España continúa siendo mala o muy mala, y retrasan las perspectivas de recuperación a partir de 2012.
Al analizar la evolución económica española en relación a la economía global, un 76% de los encuestados considera que el país seguirá en estancamiento o recesión en el próximo año, mientras que el 83% sitúa la economía mundial en un proceso de lenta recuperación y un 16% prevé su crecimiento.
El futuro marcado por economía recuperada
Tomar parte destacada en las decisiones relativas a la estrategia de negocio y las prioridades operativas es el principal reto de la Dirección Financiera. Esta tendencia es mayoritaria en los sectores de Finanzas y Seguros, Bienes de Consumo, Construcciones y Contratas, Transporte y Logística y Servicios y Consultoría. Además, la contracción de los mercados de capitales forzará a las Direcciones Financieras a centrarse en alcanzar financiación y unos costes de capital aceptables.
En el ámbito personal, los directores financieros pondrán todo su empeño en abandonar las estrategias defensivas y conducir a sus organizaciones hacia economías recuperadas, algo que implicará grandes iniciativas de cambio, sobre todo en los sectores de Energía y Recursos y Distribución.