21/09/2015 · Un currículum suele ser tu primera carta de presentación ante la empresa donde quieres trabajar, pero también se puede convertir en una arma de doble filo. Y es que, muy probablemente, si la información que presentas se muestra de forma desordenada y poco precisa, tu currículum se perderá entre la multitud y nunca pasará el temido primer filtro. Gina Aran, profesora del máster de Dirección y gestión de recursos humanos de la UOC, nos ofrece las diez claves para evitarlo.
Los seleccionadores suelen encontrarse con una montaña de currículums, ante los que parece imposible detenerse a leer en profundidad. Según la profesora del máster de Dirección y Gestión de Recursos Humanos de la UOC, Gina Aran, "los seleccionadores echan un primer vistazo, en el que buscan esos términos que responden al puesto de trabajo a cubrir"; si el currículum "no presenta la información deseada de forma fácil, probablemente no pasará este primer filtro", alerta la experta.
Para diseñar un currículum capaz de llegar más allá y mostrar el candidato como el aspirante más válido para el puesto, Aran propone un decálogo de recomendaciones:
- Pon tu nombre completo en un tamaño mayor que el resto del texto, y no con "currículums vitae" También es muy útil incluir la fecha de actualización del currículum y mostrar el número de páginas.
- Añade tus datos personales, incluyendo información como tu dirección, teléfonos de contacto, correo electrónico, fecha de nacimiento y nacionalidad, en caso de ser extranjero. Es importante destacar este apartado, comprobar que todos los datos sean correctos, y justificar esta información a la izquierda.
- Incluye una fotografía en color, que sea profesional y a la vez favorecedora, donde se te vea arreglado y sonriente, y con un fondo neutro. No aproveches fotografías recortadas de bodas, vacaciones, etc., ni recuperes fotos antiguas, porque salta a la vista. Normalmente esta fotografía se coloca a la derecha, a la altura de los datos personales aproximadamente.
- Personaliza el currículum para que se adapte al máximo a cada candidatura, es decir, que puedas editar los bloques de información para que el currículum se adapte mejor al puesto de trabajo al que quieras acceder.
- Decide el orden cronológico del currículum en función de lo que te interese más que vea el seleccionador. Normalmente se estructura de forma inversa si tus últimos estudios o trabajo realizado son los de más nivel e interés para el puesto al que optas. Pero si por ejemplo, lo que te interesa es cambiar de sector o de profesión, será más efectivo cambiar el orden.
- Opta por una redacción esquemática y sin faltas de ortografía, que combine un máximo de tres tamaños de letra, para diferenciar la información principal de la explicativa.
- Utiliza un estilo directo, claro y conciso, intentando resumir la información más importante, y enriqueciendo el vocabulario.
- Sintetiza las tareas, funciones o responsabilidades de cada puesto en un máximo de cuatro puntos, y en formato lista o con guiones; evita las explicaciones interminables.
- Utiliza negritas -sin excederte- para que el seleccionador vea con un vistazo lo que te interesa destacar.
- Indica tu verdadera competencia en idiomas: un "nivel medio" no da suficiente información. Conviene especificar, por ejemplo, si tienes un nivel de conversación o escrito fluido. El inglés suele ser una competencia imprescindible, de manera que conviene actualizar tus conocimientos periódicamente.
¿Qué incluyo primero, experiencia o formación?
El gran dilema para muchos candidatos es saber con qué información es mejor "abrir" el currículum. Según la experta en recursos humanos, hemos de ser prácticos a la hora de presentarnos: "Por norma general, se añade primero la formación, pero si es relevante es el cargo ejercido en el anterior trabajo que tu formación académica, empieza por la experiencia; en cambio, si dispones de poca experiencia pero estás muy formado, incluye la formación en el inicio."
Por lo que respecta a los conocimientos académicos, "si tienes estudios superiores no es necesario incluir los estudios primarios.. En caso contrario, añádelos e informa también sobre tus habilidades, actividades o aficiones, que indirectamente puedan favorecer tu imagen en relación a tu puesto de trabajo", afirma Aran.
Una buena manera de hacer visible tu interés por el puesto vacante es "acompañar el currículum de una carta o correo electrónico de presentación claro y conciso, donde se mencione la oferta de trabajo a la que optas, y el valor añadido que como candidato puedes aportar a la empresa".