08/07/2016 · La Fundación CYD (Conocimiento y Desarrollo), que preside Ana Botín, ha elaborado por décimo año consecutivo su encuesta anual “Barómetro CYD”, dirigida representantes de primer orden del sector empresarial, del sistema universitario y de la administración pública.
El Barómetro CYD pretende elaborar un diagnóstico sobre el papel de las universidades en la economía y la sociedad española así como sobre la evolución de sus tendencias.
El análisis de los resultados del Barómetro CYD y su comparativa con las anteriores ediciones permite analizar la importancia concedida a una serie de aspectos sobre cómo se vincula la universidad con la sociedad, cuáles son los aspectos que se consideran más relevantes y si hay cambios significativos en las sucesivas ediciones derivados de un entorno cambiante.
En este caso, la edición de 2015, se ha realizado en el primer trimestre del año 2016 mediante 336 encuestas, y los aspectos valorados como los más importantes en la vinculación de la universidad española con su entorno son:
Respecto al barómetro del año anterior, ha aumentado la importancia concedida a desarrollar políticas para atraer talento de todo el mundo (tercer aspecto valorado como más importante en esta edición y quinto en la del 2014), mientras que en la primera y segunda posición repiten los mismos aspectos.
Por colectivos, eran los expertos vinculados al sistema universitario los que más valoraban como importante el conjunto de aspectos incluidos en los diferentes vectores, mientras que en el lado opuesto se encontraban los expertos asociados al sector empresarial.
Después de ser sustituido por el vector de transferencia de tecnología en el barómetro del año anterior, en el del 2015 ha vuelto a ser, como en los ocho precedentes, el vector de la formación e inserción laboral el considerado como más importante por los expertos en la relación de la universidad española con la economía y sociedad.
En la segunda parte del barómetro se pedía al panel de expertos su opinión sobre la evolución seguida durante el 2015 por una serie de tendencias detectadas en la contribución de las universidades al desarrollo económico y social de España. Atendiendo a las 10 tendencias, en promedio, el 22% de los encuestados observaron un empeoramiento, un 38,2% una mejora y el 39,8% opinó que no se había producido cambios.
De las 10 tendencias propuestas, las tres que más mejoraron en 2015 fueron:
En sentido contrario, los expertos opinaron que se había producido un retroceso en:
La primera de ellas lleva empeorando, año a año, según los expertos consultados, desde 2010, mientras que la segunda lo hace desde 2012. Por colectivos, los expertos asociados al sector empresarial opinaban que en el conjunto de las 10 tendencias, en promedio, se había producido un empeoramiento en 2015, mientras que los más optimistas eran los expertos del sistema universitario.