03/08/2017 · La guerra por el talento lleva al menos un par de años siendo una realidad para muchas empresas. Las organizaciones necesitan a los mejores -los más cualificados, flexibles y disruptivos- profesionales que el mercado de trabajo les pueda proporcionar. Pero atraer a ese talento no siempre es fácil debido a la alta competitividad de las compañías.
En una entrevista concedida a Alto Nivel, Edson Balestri, experto en soluciones de talento de LinkedIn, ha dado las cinco claves que permiten atraer el talento más adecuado en función de la nuevas necesidades de la organizaciones, nacidas de los cambios que las nuevas generaciones y la tecnología han traído consigo.
- Valorar las soft skills. En un mundo tan polivalente, donde la era digital ya es una realidad, los conocimientos técnicos ya no son suficientes para cubrir las demandas que necesitan los negocios. A falta de cualificación y debido a los cambios contantes a los que están sometidas las industrias, las empresas deben empezar a valorar otras habilidades -que pueden ser vitales para solventar los retos- como la resolución de problemas, la adaptabilidad al cambio o el trabajo en equipo.
- Capacidad de aprendizaje. Debido a que las tecnologías avanzan a un ritmo mayor del que las empresas logran implementar y dominar los nuevos recursos digitales, los reclutadores deben centrar su atención si los candidatos disponen de una actitud abierta a la formación continua.
- El valor de la empatía. Vital no sólo para inspirar un buen ambiente de trabajo, más colaborativo y funcional, sino para entender las necesidades de clientes, proveedores y usuarios de la marca.
- Saber comunicar/escuchar. Balestri destaca la importancia de contar con profesionales que sepan comunicarse correctamente, especialmente ahora que las redes sociales han desbancado el trato en persona. Por ello matiza que tan importante es saber expresarse como escuchar.
- Alinear la cultura de la empresa con los intereses de empleados. No hay nada pero que una empresa persiguiendo unos objetivos que no son compartidos por el global de su plantilla de trabajo. Por ello hay que asegurarse de que se está al día de todo aquello que preocupa al nuevo talento y de generar rutinas de ‘feedback’ que permita atajar y consensuar los cambios al respecto.
