Tú y Raventós Codorníu, It’s a Wine-Wine

Teresa, muchas gracias por permitirnos entrevistarte y que tengamos esta conversación que pretende compartir alguna experiencia que hayas considerado que ha aportado valor a la compañía en el ámbito de RRHH.

En los últimos años, hemos sido protagonistas de un emocionante viaje de transformación de Raventós Codorníu, y uno de los hitos más destacados ha sido la profunda evolución que hemos experimentado como organización. Con la reciente llegada de Sergio Fuster como CEO y la definición de nuevas metas ambiciosas, hemos reconocido la necesidad de implementar un enfoque renovado para alcanzar nuevos niveles de éxito. Esto implica la adopción de un nuevo mindset y métodos de operación, al mismo tiempo que mantenemos un profundo respeto y aprecio por nuestro legado, el cual nos identifica y nos diferencia en el mercado. Gracias a este proceso de transformación, hemos avanzado con determinación hacia el futuro, fortaleciendo nuestra confianza y espíritu ganador al tiempo que hemos mantenido firme nuestra conexión con la historia y tradición de esta compañía centenaria..

¿Cómo lo habéis hecho?

Para crear este nuevo ADN, fue fundamental la implicación del propio CEO como principal impulsor y la participación de toda la compañía, liderada por Recursos Humanos. Esta transformación ha sido decisiva para movernos hacia la cultura deseada.

El objetivo era hacer un trabajo muy profundo, entender de dónde veníamos y hacia dónde queríamos proyectarnos. Teníamos una gran compañía y excelentes personas liderando, a lo que teníamos que sumarle una mentalidad de crecimiento. Detectamos que debíamos trabajar en una cultura transversal y un objetivo común, que diera lugar a nuevas oportunidades, para poder dar un salto cualitativo como compañía.

Comenzamos a nivel del comité de dirección, fue un momento de cohesión importante, exploramos qué teníamos, qué nos faltaba y cuál debía ser el camino. A partir de ahí fuimos trabajando con los managers y después con toda la organización, montando focus group acompañados de ayuda externa para poder hacer este cambio de mindset. Posteriormente se crearon grupos de trabajo transversales formados por personas con espíritu crítico, liderazgo y ganas de cambiar las cosas de forma ágil. Estos impulsaron iniciativas de transformación de procesos clave con capacidad de mejora y alto impacto en el negocio. Todo esto, a su vez, facilitaba pensar como una única compañía, romper silos y el hecho de atreverse.

¿Tras este proceso de transformación cómo os definirías ahora como compañía?

Nos gusta definir a Raventós Codorníu como una “Startup Centenaria”, justamente por esta combinación de futuro, agilidad y tradición. Es la identidad que construimos fruto del proceso de transformación.

Toda esta evolución nos ha llevado a ser actualmente una compañía abierta, muy flexible, formada por personas que se atreven y con un elevado orgullo de pertenencia. Una compañía con el claro y firme propósito de ‘Dar Valor a la Tierra’, que aplica tanto a las personas y a las comunidades en las que estamos como a la tierra de la que nacen nuestros frutos, todo ello con la única voluntad de dejar las cosas mejor de lo que las encontramos.

Siempre hemos apostado por la sostenibilidad y ahora lo hacemos de una forma reforzada, siendo el eje vertebrador de nuestra estrategia. Por esto, creemos en un crecimiento sostenible y desde el Departamento de Personas impulsamos la ideología de “Crecer haciendo Crecer”, hacer crecer a las personas al tiempo que hacemos crecer el negocio y viceversa. Somos una empresa que da oportunidades a las personas que trabajan en ella. Y los valores que nos representan en nuestro día a día se concretan en la fórmula H3O: la “O” de Osadía, esa fuerza que nos impulsa, junto con las 3 “H” de humanidad, humildad y honestidad, que nos definen y representan cómo actuamos y nos relacionamos.

Y ¿qué resultados visibles habéis tenido en ese cambio de mindset? ¿Cómo se ha materializado?

Llevamos dos años siendo elegidos por Forbes entre las 100 mejores empresas para trabajar, ¡un gran reconocimiento! En las encuestas de clima interno también ha tenido gran impacto. Por otro lado, trabajamos de forma mucho más transversal y ágil, somos una compañía más fuerte, más rentable y mejor posicionada y estamos obteniendo los mejores resultados de la historia reciente. Podemos afirmar muy orgullosos que el cambio de mindset ha funcionado.

Una vez trabajado este ADN tan potente y realizada la transformación de la empresa, ¿qué otros retos habéis abordado u os planteáis desde el área de Personas?

Tras esta importante transformación teníamos el desafío de cómo mostrar al mundo el potencial de trabajar en Raventós Codorníu, con una posición clara en la apuesta para atraer talento. Así que hace unos meses nos propusimos trabajar para sintetizar todas las ideas en un concepto único y simple que mostrara el valor de trabajar en esta compañía.

Para concretar cuál es nuestra propuesta de valor para el talento hemos definido nuestra comunidad: formada por personas que disfrutan de la belleza y la creatividad, apasionadas por la excelencia y con un sentido y sensibilidad que dan forma a la personalidad única de Raventós Codorníu. A partir de aquí nace nuestro concepto de propuesta de valor, singular y muy nuestro: #Wine-Wine. Nos apropiamos del concepto “win-win” y lo llevamos al terreno del vino, nuestro sector, creando un concepto único y singular propio de Raventós Codorníu. Es auténtico y genuino. ¡Porque el #Wine-Wine solo es posible cuando te unes al equipo Raventós Codorníu! “Tú y Raventós Codorníu, It’s a Wine-Wine”. Además, para dotarlo de mayor fuerza y viralidad, también hemos creado un símbolo único con las manos, que lo hace fácilmente identificable visaualmente.

¡Qué genialidad! ¿Podrías contarnos algún wine-wine de Raventós Codorníu?

Por supuesto, hay innumerables Wine-Wine en la compañía. En estos momentos destacaría el modelo de trabajo flexible, que es, sin duda, un claro Wine-Wine. Ya apostábamos por la flexibilidad antes de la pandemia y ahora hemos potenciado el modelo, pasándolo a híbrido, un 3+2, con tres días en la oficina y dos en casa, todos “fijos”. De esta forma fomentamos las relaciones e interacción de los equipos y la eficiencia, sin perder la flexibilidad del trabajo híbrido, con lo que de lunes a miércoles estamos todos en las oficinas y los jueves- viernes en remoto. Es una solución que valoran mucho todos los empleados y empleadas, lo que nos ayuda a fidelizar al talento trabajando desde la confianza.

Otro ejemplo Wine-Wine lo vemos en la apuesta por la sostenibilidad, con una viticultura sostenible y regenerativa, que nos permite obtener excelentes cosechas cuidando a la vez la tierra, trabajándola con mimo y recursos naturales para dejarla cada vez en mejores condiciones. Actualmente, todos nuestros cavas Codorníu son 100 % ecológicos.

También en una colaboración Wine-Wine con el proveedor de botellas, hemos co-desarrollado la botella de cava más ligera del  mercado, reduciendo el consumo de recursos y la emisiones de C02 en una clara apuesta por el cuidado del planeta.

Y para finalizar, un Wine-Wine del que también me siento muy orgullosa es la creación de una semana solidaria en Navidad que culmina con una carrera popular por nuestros viñedos y cavas. Ya llevamos dos ediciones, y es la primera y única carrera del mundo entre viñas y cruzando 2km a través de unas cavas a 20 metros bajo tierra. Nuestras instalaciones son idóneas para poner en marcha iniciativas relacionadas con el bienestar, físico y mental, por lo que decidimos implicarnos con las actividades de un club de running de la zona, prestando nuestras instalaciones. Lo hemos hecho de la mano de la representación laboral de los trabajadores, generando una conciencia social entre los empleados y estableciendo relaciones más estrechas con la comunidad.

Trabajar de arriba a abajo es importante, pero de abajo a arriba es muy potente, implicar a toda la organización es clave

Teresa, ¿qué es lo que más recomendarías de vuestros proyectos y, qué aprendizajes habéis tenido?

Es fundamental hacerte el proyecto “muy tuyo”, es decir acorde a lo que necesitan tu empresa y tu plantilla. Trabajar de arriba a abajo es importante, pero de abajo a arriba es muy potente, implicar a toda la organización es clave. Hay que encontrar la forma de que funcione en tu compañía, y esa implicación de todos es lo que mejor funciona. Hay que reconocer que todos tenemos un talento y aportamos algo diferente y, sobre todo,que juntos llegamos más lejos y somos mejores.

¿Para que tipo de reto, crees que este tipo de proyectos son interesantes para una compañía?

Empresas que necesiten un impulso para enfrentarse a retos importantes de negocio, que quieran redefinirse, que necesiten algo diferente, disruptivo, despertar la conciencia de la plantilla y alinear a toda la organización. Me gustaría terminar la entrevista dando la enhorabuena a BrainHunters por esta iniciativa en la que distintos profesionales compartimos nuestra experiencia en el ámbito de personas con impacto en negocio. Muchas gracias por contar con nosotros, si sirve de ayuda o inspiración para otros, me doy por satisfecha.