Revista digital
El sector > 07/01/2021

La pandemia ha potenciado una mayor concienciación sobre la salud de los empleados

El cliente de salud cada vez es más exigente y demanda más información y control de su propio proceso médico

Si hay un aspecto que las empresas han cuidado durante esta pandemia es la salud de sus empleados, tanto física como mental, ya que el bienestar de estos se traduce en un mejor clima laboral y mejores resultados empresariales. Desde Aon han ayudado a sus clientes en este sentido, y destacan que la telemedicina es un servicio en auge ante un paciente/consumidor más exigente y que demanda una mayor personalización, tal y como nos cuenta Ignacio Salvatierra.

Estamos aún en medio de una pandemia que dura ya muchos meses y ha afectado a todos los sectores de la sociedad y el tejido empresarial. ¿Cómo la han vivido en Aon España?

Debo reconocer que en Aon no nos podemos quejar. En gran medida buena parte de nuestros ingresos proceden de las comisiones por la intermediación de pólizas de seguros colectivos y el mercado asegurador suele ser siempre bastante estable.

Además, en el área de beneficios sociales, que es la que lidero, estamos capeando mejor la situación de crisis ya que la pandemia también ha traído consigo una mayor concienciación de las empresas ante la necesidad de cubrir la salud de sus empleados y poner a sus personas en el centro conociendo sus necesidades.

 

¿En qué sentido? ¿De qué forma las empresas han tomado una mayor conciencia por la salud de los empleados?

La pandemia nos ha hecho ver a todos lo vulnerables que somos. Y en esta situación, en la que cualquiera de nosotros es susceptible de ser contagiado por la Covid-19, las empresas se han dado cuenta de que tienen que velar por la salud de sus personas. La salud empieza a ser una verdadera prioridad.

Por eso, hemos visto una mayor concienciación, tanto por empresas grandes como medianas, de proteger a sus empleados y, al mismo tiempo, cómo las personas apelan a la contratación de seguros médicos individuales para protegerse y estar cubiertas en situaciones pandémicas como la actual.

 

¿Cómo han cuidado en Aon de sus empleados y clientes? ¿Qué medidas/soluciones han puesto en marcha?

Desde el primer momento, nos dimos cuenta de que teníamos que estar muy cerca de nuestros clientes y de nuestros empleados ofreciéndoles soluciones para los problemas que les presentaba la pandemia y, así, lanzamos al mercado servicios de telemedicina, test Covid, sesiones de mindfulness, consejos en materia de teletrabajo y de vuelta al trabajo presencial. Por supuesto, Aon ha hecho extensible todos estos servicios también a sus propios empleados para sobrellevar mejor el confinamiento.

 

Está claro que el cuidado de la salud, como uno de los beneficios sociales que se ofrecen en las empresas, ha cambiado, tanto por las circunstancias actuales como por la evolución de un cliente/ paciente cada vez más exigente. ¿Cómo cree que cambiará este beneficio social de cara al futuro?

El cliente ya no es “paciente” y quiere tener un acceso rápido sin esperas al servicio asistencial. Además, el asegurado exige una mayor agilización de los procesos administrativos y aligerar el proceso de suscripción del riesgo y alta en las pólizas de seguro. Por otra parte, el cliente de salud cada vez es más exigente y demanda más información y control de su propio proceso médico.

 

¿Cómo adecuar estos beneficios a los diferentes colectivos que tienen en plantilla?

Hoy en día existen todo tipo de seguros que se adaptan a los diferentes perfiles y necesidades de los empleados de forma que las empresas pueden ofrecer un tipo de seguro y un nivel de financiación de este diferente para cada perfil. Además, hay herramientas que permiten al empleado flexibilizar su nómina eligiendo entre los distintos seguros y servicios ofrecidos por su empresa para beneficiarse de las ventajas fiscales de reducir su base imponible. Por otra parte, la tecnología nos permite ahora llegar a todas las personas para ofrecerles otro tipo de servicios, más allá de los seguros, como pueden ser la telemedicina o servicios ligados al bienestar y la promoción de hábitos de vida saludable. 


¿Cómo han sido acogidos estos servicios?

En marzo todos nos encontramos confinados, teletrabajando desde casa en una situación bastante anómala y muchas empresas nos empezaron a demandar nuevos servicios ante este escenario. Empezamos a buscar soluciones en el mercado y de ahí surgió poner a su disposición el servicio de telemedicina, con una acogida magnífica. Pactamos con nuestro colaborador Open Health, proveedor de servicios de telemedicina, para ofrecerlo de forma gratuita a nuestros clientes durante la Covid en relación con consejos concretos sobre el coronavirus. Nuestra idea era darles una solución a los problemas que se nos estaban planteando a todos y la acogida fue excelente. Posteriormente, ya no solo ofrecíamos consejos médicos sobre el coronavirus sino telemedicina en todas sus especialidades. Creemos que la telemedicina ha llegado para quedarse. Dentro de la transformación digital, es uno de los muchos servicios que ya existían, pero despertaba reticencias. Ahora la gente lo reclama porque proporciona tranquilidad saber que tienes a un profesional médico al otro lado de la pantalla.

 

Habla de la telemedicina. ¿es una de las claves de los servicios de salud del futuro?

La tecnología ha llegado de lleno al ámbito de la salud. El mayor avance de la medicina en los últimos años ha sido en tecnología médica, ahora tenemos robots quirúrgicos, rayos gama, radioterapia. Los expertos dicen que la medicina está hoy en día más en manos de ingenieros que de los propios médicos por el gran avance producido a nivel tecnológico. Se ha avanzado mucho en tecnología médica, en farmacología y tratamientos personalizados. Ha habido un gran avance en infraestructuras y habrá un gran desarrollo en la innovación de servicios de relación con el paciente.

Estoy convencido de que ese es el futuro en los próximos años de la medicina. Ahora vamos a ver como algo normal que la relación paciente-médico no sea meramente presencial, sino que probablemente en la agenda del médico habrá consultas presenciales y otras virtuales a través de los medios y canales que nos da la tecnología, ya sea chat, teléfono o videollamada.

Las grandes empresas partían con ventaja en relación con los programas de bienestar, pero la gran mayoría de las compañías en España son pymes.

 

¿Qué asignaturas tienen pendientes en este sentido las pequeñas y medianas empresas?

Las grandes empresas llevan años dándose cuenta de que deben velar por la salud y el bienestar de sus personas. Además, sabemos que el seguro médico es el beneficio social más valorado, hasta el punto de que hay estudios que dicen que más del 75 % de los empleados estarían dispuestos a reducir su salario a cambio de un beneficio social como el seguro médico. Pero, sin ninguna duda, ahora más que nunca, es el momento de cuidar de la salud de nuestros profesionales. Por un lado, las personas están más sensibilizadas del riesgo y, por otro, las empresas son aún más conscientes de la responsabilidad que tienen de cubrir la salud de sus personas. Las pequeñas y medianas empresas deben sumarse a esta corriente necesaria e imparable. Probablemente, aquellas empresas que todavía no lo financian es por una mera cuestión de costes, pero empiezan a ser conscientes de que es un coste que se paga solo. Cada euro otorgado al empleado en forma de seguro médico, con los beneficios fiscales que conlleva, es como si tuviese un aumento salarial. Al ofrecer un seguro médico, las personas tienen acceso a una medicina privada con listas de espera menores y, por tanto, se reduce el absentismo. Todas las empresas se dan cuenta de que velar por la salud de sus personas es una prioridad.

 

¿Qué aconsejan a las compañías que quieren poner en marcha un programa integral de salud?

Lo ideal es financiar el seguro médico de los empleados como beneficio social dentro de su esquema retributivo y, adicionalmente, establecer programas de prevención y promoción de la salud dentro de la empresa. En este sentido, la oferta de reconocimientos médicos personalizados y la recomendación de hábitos de vida saludable son cada vez más necesarios.

 

La gestión de la salud emocional ha sido uno de los factores más importantes para muchas organizaciones en estos meses. ¿Creen que este ha sido el punto de inflexión para que en los programas de bienestar se otorgue más importancia a la gestión de emociones?

Es verdad que siempre ha habido conciencia sobre la necesidad de cuidar la salud física, pero la Covid-19, y el confinamiento al que nos hemos visto obligados, nos ha mostrado que el bienestar de las personas engloba mucho más que solo la salud física, y que la salud emocional es igualmente indispensable. Hay que velar también por ella. Desde Aon, hemos puesto dos servicios para apoyar a la salud emocional de las personas: la telepsicología y las sesiones de mindfulness.

 

Como comenta, cada vez va en aumento la preocupación de las empresas por la salud mental de sus empleados. ¿Lo han notado?

Sin ninguna duda, lanzamos un servicio de mindfulness porque empezamos a ver esa demanda en el mercado y los clientes se mostraban preocupados en ese sentido. Los primeros meses de la pandemia fueron claves y vimos que teníamos que ayudar a nuestros clientes a cuidar esa salud mental y emocional de sus personas.

 

¿Qué servicios ofrecen ustedes para ayudar a las organizaciones en la gestión de la salud de sus empleados? ¿Qué nuevos instrumentos/herramientas ponen al servicio de sus clientes?

Desde Aon, ofrecemos un servicio de analítica de datos para que las empresas tengan toda la información en tiempo real sobre la siniestralidad de las pólizas del seguro médico; así como la evolución del gasto médico por proveedor sanitario. Del análisis de estos datos, podemos proponer a los clientes medidas de corrección y programas de prevención y promoción de la salud de sus empleados. Por otra parte, ofrecemos también a las empresas un servicio de encuestas de satisfacción con respecto a los programas de salud. Asimismo, estamos en disposición de ofrecer servicios de consultoría para las empresas con el objetivo de poner en marcha programas de promoción de hábitos de vida saludable.

 

En menos de un año ha cambiado la forma en la que se concibe la salud laboral en las empresas, otorgándole cada vez mayor importancia. Como expertos, ¿qué tendencias de salud vislumbran para el futuro?

Cada vez más el mercado está demandando servicios de medicina digital, como la telemedicina y el consejo médico o la segunda opinión. El mercado solicita acceso a la medicina privada en formatos diferentes, como el pago por uso.

El paciente de la medicina privada es cada vez más exigente y demanda la titularidad de su propio historial clínico para lo cual la digitalización es un factor clave.

En el futuro, el paciente tendrá el control sobre su propio proceso médico, con una mayor capacidad de decisión sobre el mismo.

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