La 'nueva normalidad' en materia de movilidad internacional

Los equipos de movilidad internacional están aprovechando la oportunidad para demostrar que pueden aportar valor real al negocio y están diseñando una política más virtual y global, trasladando el trabajo a las personas, en lugar de las personas al trabajo.
 

Es un hecho que la situación económica y social ha cambiado, por lo que ahora es el momento de innovar y reconstruir las políticas en materia de movilidad internacional, permitiendo a las empresas ser más ágiles y reflexivas sobre dónde y en quién invertir. Ahora es el momento de que los líderes de movilidad estén a la vanguardia para permitir un negocio más global, virtual y flexible.

 
¿Cuáles son los retos ante los que se encuentran los equipos de movilidad internacional?

Redefinición de las políticas: Las empresas están reevaluando sus políticas en materia de movilidad internacional, cuestionándose la necesidad de muchos de los movimientos internacionales (gastos por desplazamientos, paquetes retributivos, etc), y por ello, están estableciendo sistemas de trabajo flexibles que permiten que muchos de sus trabajadores desempeñen sus funciones desde otro país diferente al país de su empleo.

Sistemas de trabajo flexibles: Sistemas de trabajo que permiten que algunos empleados comiencen su experiencia internacional trabajando desde su país de origen (como si de una asignación virtual se tratara) o permitiendo al empleado viajar exclusivamente cuando sea necesario.

Brindar más apoyo a los empleados: en los últimos meses ha existido un aumento en las comunicaciones con los empleados expatriados, ofreciendo apoyo adicional no monetario (por ejemplo, vuelos y alojamiento temporal, cobertura médica ampliada) y es que la pandemia nos ha recordado a todos la importancia de la seguridad y el bienestar.

Actualización normativa: Los equipos de movilidad internacional deben mantenerse alerta a los cambios en las restricciones de viaje, así como a las novedades normativas en temas migratorios, de seguridad social, laborales y fiscales, principalmente.

Flexibilidad para afrontar el futuro: hasta ahora existía una tendencia al alza de modelos tradicionales de asignación a largo plazo. Sin embargo, en la actualidad, nos encontramos ante modelos de asignación más personalizados que brindan un mayor apoyo individual y maximizan el compromiso de los empleados.

 
Transformación tecnológica: Los avances tecnológicos han conllevado que los equipos de movilidad internacional ya no soporten cargas administrativas inviables por lo que las herramientas tecnológicas se han hecho fundamentales en la cultura de los equipos y de las organizaciones.
 

Así las cosas, resulta fundamental que las políticas de movilidad internacional de las compañías se encuentren fortalecidas para ajustarse a las nuevas necesidades económicas y sociales de la “nueva normalidad”.