En BBVA trabajamos para crear un entorno en el que todos podamos desarrollar nuestro potencial

¿En qué consiste la estrategia de BBVA para impulsar el liderazgo femenino y la diversidad en todas sus dimensiones?

Concebimos el reto de la diversidad como uno de los pilares transformadores más importantes de nuestra cultura corporativa e insistimos continuamente en que la diversidad, y en concreto la de género, es una riqueza que debemos fomentar. Nuestro Comité de Dirección, y aún más si cabe nuestro presidente, están muy comprometidos con que creemos un entorno en el que los profesionales de BBVA, sin excepción, podamos desarrollar nuestro potencial, independientemente de nuestras creencias y orientaciones. Nos importa que todo el mundo se sienta incluido, por lo que trabajamos para eliminar barreras en los procesos.

¿Cómo implementáis esta estrategia?

Dotando a nuestros 14.000managersde las herramientas y el mindset que les permitan traducir nuestros valores en comportamientos concretos. Para ello trabajamos en entender dónde nos encontramos en cada una de las dimensiones de la diversidad con datos concretos. En el caso de la igualdad de género, realizamos un estudio de la evolución del talento femenino en el banco en los últimos 20 años y detectamos, por ejemplo, que el momento vital de tener el primer hijo impactaba de forma contraria en ambos géneros: en las carreras profesionales de muchas mujeres se producía un estancamiento y en las de muchos

hombres un impulso. Una vez entendido, trabajamos en determinar qué procesos debemos modificar para revertir esas situaciones, monitorizando su evolución. Y todo lo hacemos apoyados por equipos ERG (Employees Resources Groups), formados por profesionales genuina mente interesados en la diversidad que impulsan los cambios transversalmente en toda la organización.

¿Qué iniciativas destacarías de las que habéis puesto en marcha para potenciar la diversidad, la equidad y la inclusión?

En primer lugar, el hecho de habernos comprometido en conseguir que en un par de años el 35% de los puestos directivos del banco estén ocupados por mujeres. Por otro lado, en el ámbito LGTBI creo que también somos referente y destacaría la gestión del caso de Alicia García, de cuyo resultado me siento muy orgullosa. Alicia nos compartió su proceso de transición de género en la pandemia y esta vivencia personal fue la raíz de la creación de un protocolo de actuación con las personas trans en el banco que va mucho más allá de la legalidad. Al darle visibilidad, hemos recibido un goteo de casos de otras geografías que quieren adaptar los procedimientos. Y, por último, en diversidad generacional, destacaría el trabajo que es tamos realizando en la identificación de sesgos inconscientes autolimitantes relacionados con la edad de los profesionales más senior.

En BBVA, recientemente, habéis arrancado con una nueva iniciativa en colaboración con Code.org con el objetivo de formar en programación a hijos e hijas de vuestros trabajadores. ¿A qué necesidad responde esta iniciativa y qué impacto crees que puede tener en el impulso de formaciones STEM entre los jóvenes talentos femeninos?

En BBVA somos conscientes de que existe un importante gap de género en el área de STEM que desincentiva a muchas niñas a estudiar esas carreras con el consiguiente impacto en el mercado laboral. Solucionar este problema es una tarea de todos: gobiernos, instituciones, empresas e individuos, y por eso colaboramos con diferentes organizaciones que trabajan para fomentar las vocaciones STEM. Ponemos en valor la educación y la formación desde edades muy tempranas como claves para reducir la desigualdad social e impulsar el crecimiento económico más inclusivo. Y eso es lo que no lleva a apoyar a Code.org, impulsores de una prestigiosa metodología para formar en ciencias de la computación. Con ellos hemos organizado ya dos ediciones de talleres de programación para hijas e hijos de empleados de entre 5 y 14 años que pretenden despertar su interés por la programación y profundizar en los lenguajes de programación. En el taller de este año contamos con 145 estudiantes, el 48% son niñas. Consideramos que la programación será fundamental para los empleos del futuro y ambicionamos que cualquier niño o niña pueda tener acceso a estas formaciones.

Anunciasteis vuestro compromiso de llegar al año 2024 con un 35% de mujeres en posiciones de dirección, y para ello habéis lanzado el programa ‘Yo soy talento femenino’. ¿Cuáles otros objetivos están destinado a cumplir? ¿Cuál ha sido la respuesta interna a este plan de alto rendimiento?

Llevamos mucho tiempo avanzando de manera decidida en la diversidad de género y en 2022 fijamos el objetivo de llegar al 35% de mujeres en puestos directivos en 2024. Para ayudarnos a llegar a ese ambicioso objetivo hemos lanzado el programa “Yo Soy Talento Femenino” para identificar a las compañeras de BBVA con mayor potencial, acompañarlas en su desarrollo profesional y dotarlas de herramientas que las ayuden a progresar.

Queremos reconocer, visibilizar y tangibilizar el talento de las mujeres de BBVA, para que tengan la oportunidad de mostrar todo su potencial y ejercer sus cualidades y habilidades en un entorno de empoderamiento. Hemos tenido una gran acogida y ya tenemos a 200 compañeras de todas las áreas del banco y de la red comercial realizando formaciones específicas que van desde pequeñas píldoras para desarrollo de capacidades hasta programas completos de liderazgo o “coaching”. Estas compañeras están ya recibiendo un estrecho acompañamiento por parte de sus responsables y han accedido a una plataforma interna de ‘mentoring’, donde los mentores, desde su experiencia, las están guiando en sus inquietudes en el camino del autoliderazgo y el empoderamiento. Además, queremos crear una red de “networking” entre todas las participantes para que puedan compartir aprendizajes y experiencias.

¿Cuáles son vuestros retos para seguir avanzando en DEI?

Destacaría que, en género, creo que seguimos con el reto de avanzar hacia la corresponsabilidad y es un tema que tiene impacto incluso en nuestro equilibrio mental. Hay que analizar cómo abordarlo desde el punto de vista laboral para avanzar hacia una igualdad real y efectiva.

¿Qué consejos le darías a otras empresas que están interesadas en mejorar su gestión de la diversidad e igualdad de género?

Las empresas somos cada vez más conscientes de que es imposible innovar y crecer si no cuentan con una plantilla diversa y con talento. Y por eso trabajan por incorporar y retener el mejor talento femenino. No conozco una sola empresa innovadora hoy en día que no cuente con una estrategia de diversidad sólida, especialmente en lo relativo a la diversidad de género. Tradicionalmente, el mercado de trabajo descontaba que la mujer priorizaría la maternidad y el cuidado de la familia a su carrera profesional, mientras que el hombre haría todo lo contrario. Iniciativas como el modelo de trabajo flexible como el que contamos en BBVA, que combina trabajo presencial con teletrabajo y donde se prima la consecución de objetivos frente a la presencialidad, hace más fácil conciliar vida familiar con vida profesional. Desde BBVA somos también firmes defensores de la corresponsabilidad, y realizamos campañas para que los hombres disfruten de su baja paternal íntegramente. Creemos que esta es una de las mejores estrategias para atraer y potenciar el talento femenino.

¿Cómo ves el futuro en cuanto a la diversidad e inclusión en el sector bancario y qué papel consideras que juega BBVA en este ámbito?

Cada vez encontramos más mujeres líderes en diferentes ámbitos de nuestra sociedad, incluido el sector bancario. Mujeres que sirven como “role models” y que ayudan a que las niñas de hoy sean conscientes que pueden ser lo que ellas quieran en el futuro, sin limitaciones. Confío que pronto podamos ver a estas mujeres ocupando cada vez más puestos de máxima responsabilidad en los consejos de administración y posiciones directivas en las empresas, pues esa será la mejor señal de que contamos por fin con una verdadera igualdad de oportunidades.

Y desde BBVA consideramos que jugamos un rol importante en la sociedad y tenemos la responsabilidad de anticiparnos y ser promotores de estos cambios. Por ello trabajamos para que la diversidad en general y la igualdad de género en concreto, sean una realidad en todos los niveles, ámbitos y países donde tenemos presencia.

¿Podrías compartir algún desafío con el que te has podido encontrar a nivel personal con relación a tu género? ¿Qué consejo darías a las mujeres de nuevas generaciones que podrían encontrarse en tu lugar?

Es una pregunta difícil. Los valores, el esfuerzo y una actitud positiva han sido los que me han permitido alcanzar mis objetivos pero han sido siempre mis responsables los que me han empujado y ayudado a crecer. Todos ellos han sido hombres y han valorado a la persona por encima del género, en eso he sido muy afortunada.

Por otra parte, la época en la que me he sentido más insegura ha sido durante mis embarazos y mi reincorporación al trabajo pensando si me iba a penalizar en mi desarrollo profesional. Eso hizo que hiciera un sobreesfuerzo que fue en perjuicio de mi vida personal. A las nuevas generaciones les diría que es importante trabajar para estar preparada para cuando llegue la posibilidad de crecer profesionalmente, que prioricen las relaciones profesionales en el trabajo y en su entorno, y que no se auto exijan más si deciden ser madres, que lo disfruten, que es una etapa maravillosa.