La noche mágica de San Juan y el liderazgo de Nelson Mandela


Día de San Juan. Felicidades a todos los Juanes y a todas las Juanas. Juan el Bautista era hijo del sacerdote Zacarías y de su esposa Isabel. Se definió a sí mismo como” “voz que clama en el desierto”. Patrón de Florencia, Badajoz, Chiclana, Albacete, Telde, Arucas y Puerto Rico, su festividad se celebra 6 meses antes de navidad porque la tradición dice que su madre Isabel estaba embarazada de 6 meses cuando su prima María le anunció que estaba encinta. A los 23 años, sobre el año 28 dC, fue arrestado por Herodes Antipas en la fortaleza de Maqueronte y decapitado por sugerencia de Salomé.
En la noche de San Juan, ayer, muchas personas celebraron el solsticio de verano, la noche más corta del año. Rituales de fuego y agua por todo el país.
Nelson Mandela, nuestro querido Madiba, está en estos momentos en estado crítico por insuficiencia respiratoria (los problemas pulmonares que le provocaron sus 26 años en la prisión de Robben Island). Es el gran referente del liderazgo político.
He tenido la ocasión de escribir sobre Mandela en varias ocasiones. Como homenaje a Madiba, reproduzco en artículo El liderazgo de Nelson Mandela, publicado en la prensa hace unos años.
Esta semana he tenido el privilegio de participar en el VI Congreso Mundial de Inteligencia Emocional, celebrado en Johannesburgo. Sudáfrica, tras trece años de democracia, es un país feliz (según los expertos, su felicidad es mayor que la de los Estados Unidos), a pesar de sufrir una tasa de paro del 26%, un alto nivel de criminalidad (20.000 asesinatos al año, de tal modo que un 9% de los fallecimientos corresponden a causas no naturales) y 5’6 millones de enfermos de SIDA (sobre 48 millones; más del 30% de las embarazadas son portadoras del VIH). Sin embargo, posee la mejor economía de África, es miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU y cuenta una enorme diversidad y una gran riqueza de recursos naturales. El próximo mundial de fútbol de 2010 será la gran demostración de que Sudáfrica, el país del arco iris, es la tierra de la esperanza. Y el gran artífice de todo ello es Nelson Rolihlahla Mandela.
¿Cuáles son las claves del Liderazgo de Mandela? Según André Vermeulen, Consejero Delegado de Neuro-Link, muestra ocho características que le hacen especial:
-        Centrado en un propósito
-        Alto concepto de sí mismo
-        Optimismo
-        Serenidad
-        Auto-eficacia
-        Asunción de riesgos
-        Adaptabilidad
-        Resiliencia (resistencia a la adversidad)

           ¿Cómo puntuaríamos a nuestros jefes en estas ocho competencias? ¿Cómo nos puntuarían a nosotros? Estas cualidades podrían resumirse en dos: A) perseguir una meta trascendente. Su discurso al ser liberado (11 de febrero de 1990), tras 27 años en Robben Island, concluye: “He anhelado el ideal de una sociedad democrática y libre en la que todas las personas vivan en armonía con idénticas posibilidades. Es un ideal por el que espero vivir y que espero alcanzar. Pero, si es necesario, es un ideal por el que estoy dispuesto a morir”. B) mostrar un exquisito respeto hacia los demás. En sus memorias, Frederick de Klerk (que obtuvo el Nóbel de la Paz en 1993 junto a Mandela), dice de él: “Posee un talento excepcional para hacer que todos aquellos con los que mantiene trato se sientan seres excepcionales”. Mandela aprendió en la cárcel a canalizar la ira, el odio, la vergüenza hacia la valentía y la pasión.
           Lecciones de vida aplicables a todos nosotros. Ojalá contemos con retos apasionantes, a los que dedicar nuestras mejores energías, y seamos conscientes en todo momento que quienes nos rodean merecen nuestro interés, nuestra cercanía, nuestra dedicación; que debemos escuchar con atención, responder con honestidad, ser congruentes en nuestro comportamiento hacia ellos. Y, como ha dicho el propio Mandela, “convirtamos cada casa, cada estructura, cada organización en un centro de aprendizaje”.
En palabras de Madiba (como le llaman cariñosamente a Mandela), “estuve 27 años en la cárcel, pero mi mente nunca estuvo en la cárcel”. Mandela eligió voluntariamente no ser una víctima de las circunstancias, sino conducir a los suyos a la victoria moral. “Hay pocas adversidades en este mundo que uno no pueda convertir en un triunfo personal si cuenta con una voluntad de hierro y las habilidades necesarias”.
El pasado 29 de agosto, Mandela inauguró una estatua frente al parlamento británico con estas palabras: “Aunque esta estatua es para un hombre, debe en realidad simbolizar a todos aquellos que han luchado contra la opresión, especialmente en mi país". Gordon Brown, le definió como “el más grande y el más valiente de los dirigentes de nuestra generación”. La figura en bronce acompaña a las de Churchill, Lincoln y Disraeli. Mandela espera estar de nuevo en Londres en 2008, en el concierto por su 90º cumpleaños que servirá para recaudar fondos contra el sida.   
Para Jack Lang, “Mandela ha devuelto su auténtica nobleza a la política”. También ha devuelto la nobleza al Liderazgo, a un Liderazgo de principios y de servicio.


Gracias, Madiba, por tu ejemplo como líder. siempre estarás en nuestra mente y en nuestro corazón.