Cómo gestionar la marca personal cuando se es un inmigrante digital

Según los últimos datos aportados por el Staufenbiel Institut, a partir de encuestas realizadas a compañías con empleados en todo el mundo, más de la mitad de las empresas investiga previamente a sus candidatos por Internet y rastrea sus perfiles en redes sociales. Incluso alguna de estas entidades reconoce haber rechazado a algún candidato por su reputación online.

Para aquellas personas menos habituadas al mundo digital, también denominadas “inmigrantes digitales”, The Valley ha creado un protocolo con seis pasos para lograr gestionar la imagen y reputación en Internet y empezar el nuevo año con éxito.

1. Reciclarse. Hay que adaptarse a las nuevas circunstancias. Para ello, según los expertos de The Valley es importante formarse y adquirir nuevas competencias y conocimientos. "Es contradictorio que queramos impulsar nuestra presencia online si no tenemos ciertas nociones digitales ni somos conscientes de que se trata de un proceso que requiere paciencia, constancia y planificación", indican.
   
   
2. Poner en marcha un plan de marketing. La marca personal se tiene, no se crea. Con el fin de desarrollarla y sacarle el máximo partido primero "hay que plantearse lo que se quiere transmitir y conocer los propios puntos fuertes y valores que puedan ser relevantes y diferenciadores". A partir de ahí se definirán los objetivos y la estrategia a seguir: ¿por qué?, ¿para quién?, ¿con qué mensaje?, ¿a través de qué medios?, etc. No obstante, los expertos recomiendan "definir un claim positivo" que exprese de manera muy simplificada lo que nos distingue de la competencia. "Si contamos con un nombre y apellidos muy comunes, es preferible buscar una alternativa creativa que llame la atención", explican.
   
   
3. Iniciar la presencia online. Una vez se tiene claro qué es lo que se quiere transmitir, "hay que empezar a comunicar cuáles son los intereses, preocupaciones o capacidades profesionales a través de cuatro vías distintas: vídeo, texto, imagen y audio". Para ello, hay múltiples herramientas, aunque en el caso de las redes sociales, los expertos señalan que "conviene utilizar la regla 30/30/30/10 (30% de contenido propio/ 30% de información que genere valor/ 30% de noticias del sector/ 10% de contenido divertido o de inspiración) y ser constantes".
   
   
4. Potenciar las recomendaciones online. Encontrar un empleo ya no funciona por medio de recomendaciones de “boca a boca”, sino que ahora se enfoca en las relaciones digitales que se tiene. De este modo, "es necesario ir ampliando el círculo de contactos del sector, medio o temática al que se pertenece para, después, interactuar con él, compartiendo intereses para no perder la relación, dado que dichos contactos pordrían ser el camino hacia una nueva propuesta laboral.
   
   
5. Apostar por una campaña de contenidos. Una vez se tienen claros los objetivos, estrategia y medios, The Valley afirma que "es preciso apostar por contenidos de calidad y compartirlos en las plataformas pertinentes". Eso sí, matiza que, antes de publicar nada, "hay que plantearse si la información es relevante y si aportamos valor añadido con ella. "También es positivo contribuir con opiniones a blogs, foros, webs, redes sociales, aunque de manera constructiva y siendo fieles al posicionamiento, imagen, reputación y notoriedad que se quiere conseguir", añade.
   
   
6. Monitorización y seguimiento. Como en cualquier otra campaña de marca empresarial, conviene monitorizar y analizar lo que se va haciendo para saber si se está siguiendo la línea de objetivos planteada y si estamos obteniendo resultados positivos. Los expertos aconsejan crear una alarma en Google Alert con nuestro nombre y apellidos o utilizar Social Mention, así como trabajar el posicionamiento SEO, definiendo una estrategia que contribuya a aparecer en las primeras posiciones de búsqueda.