Los niños y niñas catalanes se imaginan su futuro trabajando con robots

La novedad tal vez está en lo claro que tienen los jóvenes de hoy cómo será su trabajo del mañana: más tecnológico y basado en la convivencia del hombre y la máquina. Al menos, más de la mitad de los encuestados opina que en el futuro personas y robots trabajarán juntos en igualdad de condiciones.

Estas son algunas de las conclusiones que se extraen de la XIV Encuesta Adecco Qué quieres ser de mayor, con la que El Grupo Adecco, líder mundial en la gestión de recursos humanos, quiere dar voz un año más a los más jóvenes –cerca de 2.000 niños y niñas encuestados en toda España de entre 4 y 16 años, 250 de ellos catalanes- para conocer su opinión sobre la situación de nuestro mercado de trabajo, nuestra actualidad política y social y su visión de cómo será el futuro en materia laboral. En esta primera entrega, Adecco y los niños catalanes repasan nuestro mercado de trabajo presente y futuro.

Profesiones de siempre codo a codo con los robots

Un año más, pocas son las novedades que encontramos al preguntarles a los más pequeños de la casa qué quieren ser el día de mañana. Chicos y chicas, con algunas marcadas diferencias entre ellos, siguen queriendo desempeñar las mismas profesiones que los jóvenes a los que se encuestaba allá por el año 2004.

En el global, existen grandes diferencias entre niños y niñas. Por ejemplo, la mayoría de ellos (25,9%) querría tener una profesión vinculada al deporte (futbolistas, jugadores de baloncesto, entrenadores de fútbol, tenistas…) que precede a las profesiones que engloban las fuerzas del orden y la seguridad nacional, con un 16,3% (policías, bomberos, guardias civiles, guardas forestales...).

Tercero está el grupo del mundo de la ingeniería (10,2%) y, en cuarto lugar, hay un 8,7% que se decanta por profesiones del ámbito TIC o nuevas tecnologías como youtuber, informático, creador y/o diseñador de videojuegos, programador de robots, especialista en ciberseguridad o gamer.

Ellas en cambio prefieren profesiones vinculadas a la enseñanza y la infancia, elegidas por el 22,9% de las consultadas (crece con fuerza este año de nuevo, casi 10 puntos porcentuales, y son, en su mayor parte, profesoras), seguidas por profesiones del mundo sanitario (15,5%: médicos, enfermeras, dentistas, fisioterapeutas...), profesiones vinculadas a los animales (13,8%: veterinarias, granjeras, cuidadoras de animales en el zoo...), y profesiones que tienen que ver con el mundo artístico (7%: cantantes, actrices, modelos...).

Aunque este año, las profesiones relacionadas con el mundo deportivo han crecido y ya representan el 6,2% para ellas: gimnastas, deportistas olímpicas o jugadoras de baloncesto han sido algunas elegidas.

Para los chicos catalanes recupera la primera posición la profesión de futbolista, así lo opina el 15,8% de ellos, seguida a cierta distancia de la profesión de policía, con el 12,7% (sube una plaza) y de la de profesor (9,8%) que mejora dos puestos en el ranking.

Cuarta sigue la de youtuber, más novedosa en este ranking pero afianzada ya con el 9,4% de los votos de los chicos, que precede a otro clásico masculino, querer ser ingeniero (7,9%, aunque abandona la primera plaza que tenía hace un año). Arquitectos, médicos, bomberos, veterinarios o informáticos completan el top 10 con pocas diferencias con respecto al año anterior, salvo la desaparición de dos profesiones más artísticas: actor y músico.

Por su parte, las chicas siguen queriendo ser profesoras, así lo manifiesta 1 de cada 4 (25,1%), un porcentaje que crece 10 puntos porcentuales con respecto al año anterior. Tras la de maestra, las profesiones preferidas por las niñas en Cataluña son veterinaria (10,2%) que se coloca segunda por centésimas, médico (baja una plaza) con el 10,2%, policía (se cuela en el top 10) con el 8,4% y peluquera (7,9%) que cede un puesto.

Completan las primeras posiciones profesiones como cantante, dentista (se cuela también en el top 10), actriz, gimnasta (también aparece por primera vez tan arriba) o ingeniera (menos habitual hasta ahora). Desaparecen de los primeros puestos otras opciones como las de ser psicóloga, enfermera, diseñadora o periodista.

Además de estas profesiones, hemos podido ver que hay otras más anecdóticas que enamoran a los jóvenes y niños como ser entrenador de delfines, padre, acróbata, cuidador de perros, famoso de una serie, estilista de uñas, ayudante en casa, fabricante de juguetes, informático de hospital, mariachi o rockera.

Lo que parecen tener claro los encuestados es lo que no quieren ser en el futuro. Y una edición más, es la profesión de político la que menos adeptos tiene pues un 22,3% de los encuestados no querría serlo de mayor. A esta le siguen otras como barrendero (14%), cualquier otro empleo que no sea el que quieren desempeñar de mayores (12,2%), médico (8,6%), camarero (4,9%) o bombero (4,3%).

Además, los niños y niñas encuestados en Cataluña no querrían ser ladrones, reyes, cabreros, criadas, alcaldes o presentadores de conocidos reality shows.

Más claro aún tienen cómo será el empleo del futuro. Cuando a los chicos y chicas se les pregunta en abierto cómo piensan que serán los trabajos en unos años, el 34,7% creen que serán más tecnológicos (con robots, con ordenadores táctiles, trabajaremos solo con Internet…), un 23,9% no sabe cómo serán pero es optimista (serán más chulos, mejores que ahora, más fáciles de hacer, nos pagarán más…) y un 10,9% tiene una visión pesimista (serán muy aburridos, trabajaremos más horas, serán muy difíciles, no habrá trabajo porque lo harán los robots, serán agotadores…).

También hay un 8,1% que piensa que todo será igual que ahora, sin cambios sustanciales, y un 3,9% piensa simplemente que serán diferentes aunque no saben explicar por qué.

Si además se les pregunta directamente por cómo será la convivencia entre la inteligencia artificial y los robots con las personas, un 58,1% opina que en el futuro hombre y máquina trabajarán codo con codo en igualdad de condiciones aventurando plantillas mixtas. Otro 24,4% piensa que todo seguirá igual que ahora, el grueso del trabajo dependerá de las personas aunque se ayuden de la tecnología y un 16% cree que habrá más robots que personas trabajando. El resto no sabe qué sucederá y un 0,5% de los encuestados piensa que en el futuro no habrá robots.

Los mejores jefes: Leo Messi y…una misma o Shakira

Si tuviesen que elegir ya quién sería ese jefe ideal con el que trabajar en el futuro, de nuevo hay notables diferencias entre los miembros de cada género. Por ejemplo, ellos se decantan por líderes que provengan del deporte (26,4%), seguidos de representantes del mundo de la música (18,3%), de la televisión (16,5%), del cine (4,5%) o personajes de ficción que aparezcan en series y películas (2,3%).

Ellas, en cambio, prefieren como jefe a alguien del ámbito musical (29,9%), de la televisión (23,2%), del deporte (10,5%), del cine (2,5%) o algún dibujo animado (1,8%).

Tras estos dos deportistas de élite, los niños catalanes preferirían no tener ningún jefe (7,8%), ponerse a las órdenes del piloto Marc Márquez (6,9%), del presentador de televisión Pablo Motos (5,2%) o del futbolista manchego, Andrés Iniesta (4,8%). Aunque tampoco ven mal tener como jefa a la cantante Shakira (única mujer en el top 10), al tenista Rafa Nadal, al humorista y presentador de televisión Andreu Buenafuente, y (cayendo desde la tercera posición que tenía hace un año) al futbolista brasileño Neymar.

Ellas ahora prefieren como primera opción no tener jefe (19,7%), en segundo lugar, eligen a la colombiana Shakira como líder (11,5%), a Pablo Motos a continuación (10,7%) quien da paso a la cantante Aitana, elegida por el 6,3% de las niñas en Cataluña.

También aparece entre sus opciones el actor Mario Casas, quien lideraba la encuesta el año pasado, el cantante David Bisbal, Leo Messi, la televisiva chef Samantha Vallejo-Nágera (es la primera vez que aparece en el ranking), la exgimnasta Almudena Cid y alguna de las integrantes del grupo musical Sweet California.

Fuera de esta lista de los más votados han aparecido otros jefes de muchos ámbitos como periodistas de renombre -Matías Prats-, grandes científicos que ya no están con nosotros, como Stephen Hawking, famosos pintores como Picasso, grandes estrellas del deporte estadounidense –Lebron James, Michael Jordan-, dibujos animados –Pocoyó, Elsa de Frozen, Mickey Mouse, Bob Esponja-, o personajes de ficción como Sheldon Cooper.

Este año, como ya sucedió el pasado, algunos youtubers se han colado en la lista: desde El Rubius a Vegetta777 aparecen entre las preferencias infantiles.

El truco de la felicidad laboral

Un aspecto muy importante a tener en cuenta de cara al mercado de trabajo es cómo se sienten sus trabajadores: ¿son felices?, ¿están satisfechos? Por ello, Adecco ha querido saber cuáles son los ingredientes secretos para que las personas sean felices en sus puestos de trabajo.

Para los niños y niñas catalanes el aspecto más importante para ser feliz en el trabajo es disfrutar de un buen ambiente laboral y una buena relación con los compañeros, así lo cree el 23,7% de los encuestados.

En segundo lugar, “que te guste tu trabajo” es la respuesta más habitual entre los consultados (15,9%), seguido muy de cerca de percibir un buen salario (15,5%). Un 10,9% opina que la felicidad laboral depende de la actitud que uno adopte ante el trabajo: “hay que ir contento”, “tener una actitud positiva”, “hacerlo bien”, y un 7,1% piensa que lo importante es que recibas un buen trato: “que no te griten en el trabajo”, “no tener estrés”, “que te traten bien”.

Además, los niños consideran muy importante divertirse en el trabajo para ser felices (6,5%) y proponen algunas medidas como “tener una pista de fútbol para jugar en el descanso”; seguido de disfrutar de un buen horario que les permita conciliar vida profesional y personal (4,8%) aportando ideas como “poder elegir tu horario”, “poder tener tiempo para la familia”, “no trabajar todo el día”, o incluso, “no madrugar mucho” y tener un buen jefe (3,9%) al que poder “echar si llega muy tarde por las mañanas”, “que puedas cambiar al jefe si falta mucho” o “que no se queje cuando le pidas vacaciones”.

También valoran el reconocimiento de superiores y colegas para ser felices o disponer del material adecuado para desempeñar bien el trabajo: “tener ordenador”, “tener ventanas en la oficina para poder ver la calle” o “que haya cafetería”. Por último, otras peticiones han sido más personales como “que pongan spaguettis en el comedor”, “tener regalos sorpresa”, “que no haga calor en la oficina” o “poner sofás de masajes”.

Muy desencaminados de la visión que los adultos tienen de este tema no están los más pequeños de la casa, pues cuando esta misma pregunta se les hace a los trabajadores, estos consideran también el buen ambiente laboral como algo primordial .

Vista la importancia del salario entre las prioridades para ser feliz, Adecco ha preguntado a los jóvenes y niños cuánto dinero querrían ganar el día de mañana y aquí el contraste entre niños y niñas ha sido notable de nuevo.

Ellos eligen una cantidad millonaria como primera opción (35%) y es que muchos sueñan con ser futbolistas y entonces piden que les paguen “100 millones por temporada”, aunque la segunda opción es algo más razonable y se quedaría en un sueldo medio de entre 3.000 y 5.000 euros al mes (8,5%).

En cambio, las niñas catalanas votan en mayor medida un salario que va entre los 500 y los 1.000 euros mensuales (21,6%) y después suben a un salario medio de entre 2.000 y 3.000 euros (13,1%).

De nuevo, las anécdotas han sido numerosas pues hay respuestas de todo tipo: “quiero ganar infinito”, “mucho dinero”, “lo suficiente para mantener a mi familia”, “por lo menos 40 euros al mes”, “da igual mientras no sean 20 euros”, “ni mucho ni poco”, “un sueldo realista: 10.000 euros al mes” o “ganar como un catedrático”.

¿Cómo buscar trabajo?

Una tarea a la que los chicos y chicas catalanes tendrán que enfrentarse en el futuro será, irremediablemente, la búsqueda de empleo. ¿Lo harán de la misma manera en que se hace actualmente?, ¿cómo lo ven ellos?

El 45,1% de los encuestados afirma que buscará trabajo por Internet, moviendo su CV en RRSS, aplicaciones móviles, portales de empleo, webs, grabando y difundiendo sus propios vídeos… Esa será su principal herramienta para este fin. Otro 29,6% será menos digital y lo hará entregando en mano su CV a los centros de trabajo que sean de su interés. Solo un 5% piensa que la mejor manera será apuntándose al paro y un 5,6% combinaría estas tres opciones para hacer una búsqueda más eficaz de empleo.

Pero también los hay que recurrirían a sus contactos personales para optar a una posición (2,8%) “pidiendo ayuda a mis amigos”, “a través de conocidos”, o “pediría trabajo donde papá”. Un 1,9% lo haría a través de prácticas formativas u opositando, y un 1,2% montaría su propia empresa. El resto aún no tiene claro cómo tendrá que enfrentarse a esa etapa de su vida.

Tras esta búsqueda de empleo y al incorporarse a un proceso de selección, llegará el momento de que se enfrenten a una entrevista personal.

Lo que más destacarían los niños y niñas catalanes en una entrevista de trabajo son, un año más, las características que componen su personalidad (37,4%). Se describen como buenas personas, simpáticos, amigables, sociables, puntuales, sinceros o leales.

Después, destacarían las competencias o habilidades de las que hacen gala (16,2%): creatividad, inteligencia, ser buenos en ciencias, buenos dibujantes… Esto da paso a la actitud que adoptarán ante el trabajo (10,8%): “lo haré bien”, “seré muy trabajador”, “no me rindo nunca”, y un 9,4% reconoce que no sabe de qué hay que hablar en estas entrevistas.

Un 6,9% de los niños de la región dan datos personales de toda índole: “limpio con frecuencia y lo dejo todo reluciente”, “prefiero votar a pelear”, “quiero encontrar pronto al amor de mi vida”, “suelo reciclar” o “soy millonario”. La vocación que sienten también la ponen de manifiesto en el 4,2% de los casos, o su descripción física (3,5%) alegando que son guapos, altos, fuertes, rubios o morenos… Otro 2,9% destacaría su formación para el puesto o si ha tenido buenas notas y un 2,2% destacaría lo buen compañero que es.

En menor medida hablan de sus hobbies, incluso algunos contarían cosas negativas de sí mismo (soy cabezota, estoy un poco loca, tengo muy mal genio, soy cuadriculado), los idiomas que hablan, su experiencia previa o su disponibilidad horaria.

Durante la jubilación… ¡a recorrer mundo!

Hasta la fecha, en las ediciones anteriores de la encuesta pasar la jubilación al calor de la familia había sido una opción unánime para ellos y ellas. Pero este año, tanto chicos como chicas prefieren dedicar la tercera edad a viajar, así lo afirma el 19,3% de ellas y el 17,4% de ellos.

Tras esta decisión, cada sexo toma un rumbo distinto. Los chicos catalanes eligen como segunda posibilidad pasar tiempo con la familia, en especial, cuidando a los nietos (11,8%), prefieren pasar sus últimos años viviendo tranquilamente (9,3%), haciendo deporte (8,1%), practicando sus aficiones (6,3%) y dedicándose a la jardinería o al huerto (6,3%) o divirtiéndose (5,7%) y haciendo las tareas del hogar (5,7%). Descansar y no hacer nada también están entre sus preferencias.

Ellas, tras optar por viajar, escogen en segundo lugar pasar la jubilación cuidando de la casa y las tareas domésticas que conlleva (14,7%), estando con la familia (13,2%), a hacer actividades relacionadas con manualidades o creatividades (8,8%) como tejer bufandas, hacer pulseras, pintar cuadros, a vivir tranquilamente (6,4%), a sus hobbies (5,9%), a descansar (4,7%) y a divertirse (3,8%). Tener un huerto o dedicarse a otra profesión también es un buen plan para la jubilación.

Ver la tele, pasear, ayudar a ONG, leer, cuidar mascotas, estar en casa, dormir, escuchar música, hacer repostería, jugar a las cartas, jugar con la consola, ayudar a mi suegra o cobrar la pensión son algunos de los planes que tienen los más pequeños para cuando les llegue el momento de la jubilación. Aunque también hay quien ha dado la pincelada negativa alegando que “tal y como están las cosas no tendré jubilación si me quedo en España”, que afirma una joven de 16 años.

Este año vuelve a cobrar importancia entre las niñas catalanas la idea de dedicarse a las tareas domésticas, tras varios años en los que esa opción había perdido fuelle. ¿Por qué esto es así?, ¿toman como referencia el modelo que ven en sus casas?

Adecco ha preguntado a los niños y niñas de nuestra comunidad que quién se encarga de hacer las tareas en casa y un 51,5% de ellos dice que es algo exclusivo de mamá, un 45,7% dice que sus progenitores se reparten las tareas del hogar y solo un 1,3% dice que es papá quien más hace en casa. El resto considera que ninguno hace nada o no tiene claro quién limpia la casa.