Revista digital
TRIBUNA
noviembre 2012

Conversaciones
pendientes.

Joan Quintana,
director de Coaching Relacional

 
Joan QuintanaSomos seres de repetición y las conversaciones pendientes es una de sus manifestaciones
En nuestra lucha por ser reconocidos, obteniendo los resultados esperados, aportando mejoras, obedeciendo desde la supeditación o desde la lealtad, cooperando y desarrollando a las personas y el negocio podemos crear expectativas en los otros o esperar de los otros respuestas que no llegan, generando una vivencia de desequilibrio entre lo que se da y lo que se recibe, siendo el germen de un debilitamiento o fisura en la relación. Las conversaciones pendientes son como una rotura, como si el flujo que une dos personas, dos departamentos de una organización o dos países se hubiera roto y fuera necesario juntarlos para recuperar las posibilidades que la relación nos puede aportar. Una sola conversación debilitada o pendiente en una familia o en una organización altera todas las relaciones de sus componentes y su origen se encuentra en expectativas que no se han satisfecho.

La dificultad de afrontar la conversación se comprende si contactamos con la emoción que la conversación pendiente nos genera. Algo de nuestro ego fue “tocado”, queríamos ser tratados y reconocidos de otra manera y, con la vivencia de ser negado, activamos una reacción de ataque o rabia. Es esa reacción emocional la que nos bloquea y evitamos así la relación con el otro. Como si de esta manera el otro fuera expulsado de nuestro sistema de relaciones.

No todo lo pendiente produce malestar, ni todo tiene que ser conversado, pero las emociones nos guiaran. Hay conversaciones pendientes que heredamos, que están presentes desde hace muchos años o generaciones. Hay conversaciones pendientes entre miembros de una misma familia que se “heredan” de padres a hijos y los nietos no se hablan con sus primos pero ya no saben que razón hay para negar la palabra, pero esto ya es constituyente de la realidad familiar.

Generamos conversaciones pendientes con hermanos por una herencia o por nuestras vivencias y comparaciones sobre el amor recibido por los padres, resentimientos, por las sensaciones de poco reconocimiento recibido por amigos o compañeros de trabajo, por expectativas que no se cumplen, en definitiva, por no haber sabido cuidar lo suficiente la relación con el otro. Departamentos de Producción con los de Ventas tienen sus dificultades históricas para establecer relaciones poderosas que generen relaciones operativas y resolutivas, y estas dificultades tienen sus efectos en la cuenta de resultados. En las organizaciones las conversaciones debilitadas o rotas son muy frecuentes. La empresa es un espacio de relación en donde se conviven muchas horas.

Somos seres de repetición, y las conversaciones pendientes es una de sus manifestaciones.

Hacemos una distinción en las conversaciones pendientes entre conversaciones de fortalecimiento y conversaciones de restablecimientos de vínculo:

  • Conversación de fortalecimiento de vínculos: es una conversación que aparece como necesaria por la falta de atención, cuidado y dedicación en la relación, y que ha debilitado sutil y progresivamente el vínculo con una persona.

  • Poder conversar con alguien con quien podemos y seguimos manteniendo la relación, pero sentimos que hay algo que es necesario aclarar, compartir y que lo vamos dejando no sabiendo muy bien porque. No hemos roto la relación, la estamos dejando que se deteriore por nuestra incapacidad de conectarnos con lo que sentimos y de no dejar a lado nuestro ego y entender que es más importante cuidar esta relación que no queremos que se deteriore.

    La conversación de fortalecimiento de vínculos nos permitirá recuperar y desarrollar intereses y necesidades comunes, compartir y coordinar acciones que nos permitan incrementar nuestra eficiencia relacional.

  • Conversación de restablecimiento de vínculos: es una conversación generada por expectativas no cumplidas, conflictos no resueltos o abandonados, que han provocado un desencuentro que ha llevado a una ruptura en la relación. Esta conversación pendiente tiene la finalidad de reconstruir y reparar una relación que de momento está
    rota y liberar las tensiones que impiden relacionarnos.

  • Conversaciones liberadoras. Guía de preguntas.

    Para poder realizar una conversación liberadora nos puede ayudar contestarnos todo un conjunto de preguntas que nos pueden ordenar las emociones, la disponibilidad, los argumentos y la acción.

    ¿Por qué se originó y con qué persona tengo la conversación pendiente? Podemos identificar sin dificultad con quién tenemos pendiente una conversación, pero lo que nos permite avanzar hacia una conversación liberadora es ordenar las causas que la ha generado. Las expectativas no cumplidas son otra causa que está en el origen de conversaciones pendientes. Esperamos de la otra persona que sienta, piense y actúe de una forma determinada, pero nosotros no explicitamos lo que deseamos que ocurra. Esperamos y esperamos que nos respondan como deseamos y
    al no hacerlo nos sentimos desconsideramos y reclamamos desde el enojo y la sensación de rechazo y lo hacemos distanciándonos, disminuyendo la presencia e iniciando una conversación pendiente.

    ¿Qué emociones me han impedido afrontar la conversación pendiente hasta ahora? Cuando evocamos la persona y situación relacionada con la conversación pendiente nos invaden emociones y pensamientos que normalmente están al servicio de aplazar su resolución y desmerecer su importancia. Las emociones de tristeza aparecen cuando su origen es lejano y con una persona querida. Aparece la rabia cuando el origen es reciente y la negación es un pensamiento recurrente. El control de la emoción es una protección para no tenerse que plantear qué parte de mi está manteniendo que el encuentro sea una dificultad.

    ¿Qué quiero conservar en mi relación con la persona que tengo la conversación pendiente y puede estar en peligro? Esta es una pregunta básica antes de encarar una conversación, reconocer que quiero o que necesito conservar en mi relación con el otro y al ponerlo en peligro estoy poniendo en peligro mis propios retos profesionales o vitales. ¿Cuáles serán mis tres argumentos centrales en la conversación pendiente para facilitarla? Ordenar el discurso construido desde la voluntad de encuentro y de reconstrucción de la relación no de la venganza y el resentimiento. ¿Qué emoción tengo que mantener para no boicotear la conversación? Visualizar la conversación y anticiparse a posibles respuestas que sabemos nos pueden generar una respuesta agresiva que pueden poner en peligro la continuidad de la conversación y el encuentro deseado.

    Hay que conversar aceptando que el otro puede reaccionar de forma inadecuada ya que no ha tenido la oportunidad de preparar la conversación.
    entrevistas  |  reportajes  |  almuerzos  |  tribunas  |  noticias  |  proveedores  |  nombramientos  |  estudios  |  agenda  |  libros  |  el equipo  |  enlaces  |  mapa web

    © 2007 CUSTOMMEDIA S.L. edita EQUIPOS Y TALENTO  |  Equipo de redacción  |  Contacto  |  Política de privacidad

    Av. Diagonal, 463 bis 5ª planta, Barcelona 08036  Tel. 93 4195152  Fax. 93 4101755