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TRIBUNA
marzo 2018

Cambiar si, ¿pero cómo?

Jaime Batlle,
Director Programa de Desarrollo Directivo de Fundación FOE

 
Jaime BatlleSe ha escrito mucho sobre este concepto, desde múltiples ámbitos, especialmente desde el empresarial, cogido a menudo de la mano de herramientas para la apertura, la relajación, el coaching en todas sus variedades: (ejecutivo, sistemico,y etc, etc...)el mind fullness, la neurociencia....
Hay dos mantras que estos gurus de lo esotérico te repiten si les resultas "difícil ". - eres muy racional y el otro es: "eso es tuyo". Confieso que tengo debilidad por esta frase, aunque a mí no me haya funcionado. (Prueben por ejemplo con su pareja, y verán)

La verdad irrefutable es que se trata de un gran negocio. En Estados Unidos el Yoga es la cuarta industria que más crece y el volumen de negocio de estas nuevas religiones, igual que en Europa es asombroso.

Pero volvamos al concepto de cambio, aplicado al ámbito empresarial.
Uno de los mejores jefes que he tenido en mi aprendizaje profesional solía decir que solo se cambia si se siente la necesidad. Añado que se cambia ante la conciencia de una situación que hay que revertir; y aquí es donde está la necesidad de matizar.

Hay cambios emocional - inducidos. Son los que nos llevan a una acción inmediata como por ejemplo, aquellos que nos propone la publicidad.
Aplique el chiste adaptándolo. "Si tiene ganas de consumir lo que le dicen sabiendo que ha sido hábilmente manipulado, siéntese y espere a que se le pase". No efectuar estos cambios es solo una cuestión de darse tiempo y se necesita una alta madurez y coherente interpretación de la realidad.

Hay cambios impuesto-dramáticos. Es cuando se va al doctor y le dice: "tiene usted los pulmones hechos ceniza. O deja de fumar o... Usted mismo"
Estos cambios también son difíciles aunque el objetivo sea tan dramatico que te vaya la vida en ello. Aún así he conocido personas incapaces de cambiar... hasta en estas circunstancias.

Hay cambios misionero-oídos sordos.
Son los que pertenecen al ámbito del cambio para mejorar.
Estas propuestas de cambio son las que suelen emitir nuestros jefes en las Empresas y en las escuelas de negocio, de forma recurrente.

Por último están los cambios vital-adaptativos. Los que vamos realizando a lo largo de nuestra vida en función de dos variables: el cambio de objetivos y la adaptación al oficio de vivir.
Estos son los cambios realmente importantes y que nos transforman a lo largo de nuestra vida personal y profesional .

Para cambiar es absolutamente fundamental que el objetivo cambie.
En este terreno es donde se estrellan los mensajes de bien intencionados jefes, docentes y empresas.

¿Como resolver este problema de autismo?.
¿Como va a cambiar un Directivo en zona de protección si su objetivo en la vida es ganar dinero?.
Su conducta se traducirá en actos orientados a defender el fortín.
¿Como va a cambiar el empleado cuyo objetivo en la vida es salir del espacio de un trabajo asfixiante?
Su comportamiento será mirar impaciente la hora en el reloj y salir a la carrera.
¿y el desmotivado?. ¿Y el que está limitado por incompetencia o caracter?

Y vienen entonces los gurus y las escuelas de negocio y dictan sentenciando: !Con Liderazgo!. !Con buen Management!, y peor aún: ! Con objetivos!, !con Motivación!.

Pues !!no señor!!. Batalla perdida.
Si, de acuerdo, pero ?cómo hacerlo?
¿Como hacer que las personas cambien?

Propongo lo siguiente desde la posición de Manager:

  • respete a las personas que no quieran cambiar.

  • cree escenarios y culturas honestas

  • haga que sus directivos en el escenario de esa cultura sean ejemplo.

  • no se agobie si las personas no cambian o no lo hacen en la medida que usted quiere, dado que tiene el poder de despedirlas.

  • trate bien a las personas

  • olvídese de motivar. La motivación es interna y cualquier intento detectado es interpretado como manipulador

  • En situaciones flagrantes, antes de despedir, ponga en crisis de verdad. Si, es complicado y emocionalmente desgasta, pero funciona para recuperar al profesional.

  • deje de trabajar con personas mediocres en la actitud, que es la más destructiva de las mediocridades.

  • comunique para hacer valer lo interesante que es pertenecer a su microcosmos ( empresa ).

  • rodeese de buenas personas.


No le aseguro que si aplica todo lo anterior, conseguirá que las personas que trabajan con usted hagan el tránsito que usted ve, pero quizá tenga más posibilidades.
Ah, y no olvide algo muy importante; si su fijación por el cambio de los demás es patológico, hágaselo mirar. Siempre podrá recurrir a los gurus del coaching o el mind fulness, pongo por caso.

Ah, y una cuestión fundamental: si el empleado no considera su profesión como un elemento integral en su vida, no hay nada que hacer respecto a los cambios que podamos proponer, lo cual no implica que el colaborador deje de ser válido y valioso.
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