Qué hacer después de una mala entrevista de trabajo

Según el portal Gestión, la falta de conocimiento del propio currículum, no saber con exactitud las características del puesto al que se postula o ponerse nervioso frente al entrevistador son algunos tropiezos de muchos solicitantes de empleo.

Si la última entrevista de trabajo te dejó una sensación desagradable por los errores cometidos, conoce a qué alternativas puedes recurrir para no volver a caer en lo mismo, según Forbes:

1. Reflexiona

Después de haber tenido un encuentro poco alentador con el reclutador, debes centrarte en analizar con detenimiento tus errores. Es importante escribirlos y después tomar conciencia de cada uno de ellos para describir con detalle qué ocurrió. Por último, encuentra una solución para que la próxima vez no caigas en el mismo error.

Tal vez deberías haber investigado más acerca de la empresa, sus últimos resultados y sus objetivos a corto plazo, o probablemente necesitaste conocer más a fondo las características del puesto o del perfil buscado.

2. Comunica los errores cometidos

Aunque suene extraño escribirle al entrevistador después de una entrevista poco exitosa, si decides escribirle un email al reclutador, puedes agradecerle en primer lugar la oportunidad brindada y de paso, solicitar disculpas por los errores cometidos. De esta manera, podrás construir una marca personal positiva que quizás en un futuro pueda abrirte de nuevo las puertas a una nueva entrevista para esta empresa.

3. Escribe un email de agradecimiento

Igual que en el email de disculpa, si escribes un correo de agradecimiento puedes recordar datos concretos de tu experiencia o formación y recordar los puntos fuertes de la entrevista, obviando los aspectos los malos o flojos.

Por supuesto, puedes optar por esta alternativa o la anterior, pero si crees que la entrevista estuvo marcada por tus errores, lo mejor será enviar un email pidiendo disculpas.

4. No pidas perdón al salir

Quizá tu teléfono sonó varias veces durante la entrevista, tal vez derramaste el café encima del entrevistador, llegaste masticando un chicle or incluso puede que se hayas olvidado ciertos modales al entrar en la sala, pero lo ideal es pedir disculpas en a porteriori y no hacerlo de forma general al terminar la entrevista.

5. Aprende a perdonarte

Es normal sentirte mal al principio pero es importante pasar página una vez que hayas aprendido de tus errores. Evita culparte a ti mismo una y otra vez porque eso no te permitirá avanzar hacia tu primer propósito: salir victorioso de la siguiente entrevista laboral.