Andrea D’Martín,
Experta en Empleos Exponenciales y Head of Customer Experience & Marketing
Singularity Experts
13/03/2020 · Gestión del cambio, entornos VUCA, digitalización y globalización, perfiles y competencias más demandadas que cambian conforme se transforma el panorama socioeconómico y, en consecuencia, el mercado laboral... Todos estos elementos son tan solo algunos retos a los que deben enfrentarse hoy en día tanto los líderes empresariales como los empleados. En ese marco, entrenar nuestras competencias, tanto técnicas como interpersonales y digitales, es prácticamente una obligación que pende tanto del propio trabajador como de la compañía, que debe facilitarle espacios y herramientas que así lo promuevan. En este escenario tan cambiante, existen empresas como Singularity Experts, que se dedica a orientar a las personas que no saben en qué trabajar o estudiar, sobre la formación y los empleos del futuro que mejor se le van a dar. Hoy hablamos con la experta en Empleos Exponenciales y Head of Customer Experience & Marketing de la firma, Andea D'Martín.
Nuestro producto orienta sobre empleos de futuro, todos ellos relacionados con la tecnología, ya sea desde un punto de vista técnico y humanista. Dentro de estos empleos contamos con un amplio grupo de trabajos que se desarrolla en el entorno digital. También tenemos en cuenta que las herramientas digitales son parte del futuro, e incluso del presente de muchos empleos, por lo que siempre intentamos potenciar estas habilidades en nuestros usuarios, ya sea recomendándoles bootcamps o cursos online específicos.
Sí, es evidente que existe un gap. Las empresas demandan cada vez más puestos digitales y tecnológicos, pero no encuentran perfiles que cubran estas necesidades. Según un informe de Randstad, para este 2020 se estima que casi 2 millones de puestos de trabajo se quedarán sin cubrir por falta de perfiles cualificados. La formación universitaria se está quedando en muchos casos atrás, centrándose más en aspectos académicos y otorgándole poco valor a la práctica y al desarrollo de habilidades necesarias para los empleos de presente y futuro. Por ello cada vez vemos más cursos ad hoc para desarrollar estas habilidades digitales, completamente separados de la formación reglada tradicional.
Las competencias humanistas está cobrando más relevancia que nunca. Si una máquina es capaz, por ejemplo, de calcular más rápido y más preciso que los humanos, no es un terreno donde debamos competir, sino que debemos aprovecharnos de ello. La automatización y la robotización de los empleos exige que seamos cada vez más humanos, ahí es donde entran estas competencias humanistas, como la creatividad, la empatía, el pensamiento crítico… Además, las empresas se están dando cuenta de que las competencias socioemocionales son clave a la hora de contratar perfiles. El trabajo en equipo y la capacidad de adaptación son puntos clave para el Future of Work. Cada vez vamos a trabajar más por proyectos, en instituciones líquidas y de manera remota, y esto exige unas competencias intrapersonales muy desarrolladas.
El reskilling es un punto clave que tienen que afrontar las empresas actualmente. Según Eurostat, solo el 9% de los empleados españoles recibe formación por parte de su empresa. Esto hace que muchas veces la empresa no pueda cubrir posiciones con talento interno y los empleados no encuentren la forma de promocionar internamente. También nos encontramos con despidos masivos; departamentos enteros se automatizan o se transforman y las empresas no han sabido formar a sus empleados para que ocupen nuevos roles. Actualmente estamos viendo como más empresas quieren utilizar el producto de Singularity Experts para ayudar a sus empleados, conseguir que sigan formándose y retener el talento.
Actualmente las competencias digitales son un must. Por ejemplo, en el sector agrícola, un sector completamente tradicional y predominantemente manual, está aumentando la demanda de agricultores y ganaderos “digitales”. Estos perfiles controlan desde sensores en animales, hasta drones para cultivo, muchas veces desde una tablet. Con este ejemplo podemos ver como la digitalización es ya una realidad en cualquier sector que se nos ocurra. Con esto como prueba, creemos firmemente que las oportunidades de desarrollo profesional aumentan tanto con las competencias digitales, como con las tecnológicas en cualquier ámbito.
Muchas veces las empresas no piensan en sus empleados a largo plazo y creen que formarlos no merece la pena. Hay que cambiar esta mentalidad, si formas a tus empleados y les das oportunidades de crecimiento, seguramente quieran seguir dentro de la empresa y crecer con ella.
Otro de los retos es trasladarle a la plantilla las ventajas de esta formación. Muchas compañías proponen que los empleados se formen en su tiempo libre, y esto se puede ver como una imposición por parte de la empresa, más que una ventaja. También nos encontramos con el reto de ofrecer formaciones de futuro que se puedan adaptar a los distintos niveles de trabajadores. A día de hoy muchas empresas dan formaciones de competencias tan básicas como puede ser el paquete Office, pero no piensan en formaciones que ayuden al empleado de cara al futuro. Según Deusto Formación, el 66% de los cursos impartidos en España para empleados se hicieron para reforzar una habilidad ya existente, esto es un claro ejemplo de que las empresas siguen sin pensar en clave de futuro a nivel formativo.
El upskilling piensa en la capacitación del empleado de cara a futuro y en la retención del talento. Por ejemplo, que un empleado no sea actualmente manager, no significa que no pueda serlo dentro de 5 años. Por esto hay que formar a los empleados en habilidades transversales desde el principio. Aquí las soft skills son especialmente relevantes, ya que habilidades como el liderazgo o el trabajo en equipo se pueden desarrollar a todos los niveles en una empresa y van a servir a los empleados tanto para sus puestos presentes como futuros. Lo mismo ocurre con la tecnología, permitir que un empleado desarrolle sus skills técnicas hará que cada vez pueda desarrollar tareas más complejas y pivotar a otros puestos que se demanden dentro de la empresa de cara a futuro.
La gestión del cambio afecta de forma global a las organizaciones. La adopción de hard skills por parte de los trabajadores puede ayudar principalmente a los cambios dentro de los procesos, productos y sistemas de información, que son los que más se ven impactados por las tecnologías. Mientras que el cambio en las estrategias y en la gestión de las personas se llevará a cabo de forma más efectiva cuanto más trabajadas estén las soft skills, tanto de los líderes del cambio como de todos los empleados.
El reskilling y el upskilling va a impactar en la forma que tenemos de ver nuestras carreras profesionales. Ya no es posible llegar a cierto nivel y pensar que no tenemos que seguir formándonos o adquiriendo conocimientos, ahora más que nunca la formación tiene que ser constante a todos los niveles. Esto nos va a llevar a ver organizaciones más horizontales, donde todo el mundo esté en constante aprendizaje y todos los perfiles tengan que aprender del resto de personas que les rodean. También veremos organizaciones más preocupadas por el futuro de sus trabajadores a largo plazo y con estrategias concretas para crear y retener talento.