07/06/2019 · Ahora que son muchas las organizaciones que están a medio camino de transformarse, mientras lidian con un contexto empresarial complejo, cambiante e incierto, la cultura corporativa y los valores de la compañía se han convertido en el ‘pegamento’ que une a la fuerza de trabajo y el propósito de la organización con los resultados de negocio. Así lo confirmaban recientemente, tanto el CEO de BlackRock, Larry Fink, como el presidente y director ejecutivo de State Street Global Advisors, Cyrus Taraporevala.
Según publica Gallup en un artículo, los ‘activos intangibles’, como es el caso de la cultura corporativa, aportan –de media- el “52% del valor de mercado de una organización”, mientras que en algunos sectores, dicho porcentaje se eleva hasta el 90%. Por tanto, “abogar con el propósito de ser parte integral de la cultura de una organización define el liderazgo exitoso”.
Sin embargo, los expertos matizan: “El propósito no puede limitarse a un solo eslogan”. Por ello, con el fin de avanzar, inspirar y unir a una empresa, el propósito debe actualizarse en el trabajo diario. En este sentido, los datos de Gallup muestran que las empresas tienen un largo camino por recorrer en este tema, aunque son muchos líderes los que han comenzado a poner el foco en él, obteniendo con ello excelentes resultados.
Es el caso de Unilever, cuyo propósito formal es "hacer que la vida sostenible sea un lugar común". En línea con este valor, la compañía invierte en campañas y acciones sostenibles a través de sus marcas, las cuales han superado la tasa de crecimiento promedio de la compañía durante los últimos cuatro años y representaron el 70% del crecimiento de la facturación de Unilever en 2017.
Este caso contrasta con los datos publicados por Gallup, que revela que “solo el 27% de los empleados cree firmemente en los valores de su compañía, y menos de la mitad está totalmente de acuerdo en que saben qué representa su organización y qué la hace diferente”. Frente a ello, los expertos señalan cómo un propósito práctico como el de Unilever, tiene un efecto positivo en todo lo que hace una empresa. Pero, ¿cómo se cambia una cultura? Gallup revela en el libro ‘It's the Manager’, tres pasos claves para hacerlo.
Finalmente, el artículo destaca que el motor del cambio de cultura, centrado en el propósito, “requiere una gran cantidad de combustible, y tiene que venir de la parte superior”. No obstante, también incide en la importancia de implicar al resto de profesionales en este proceso, así como de medir y gestionar los resultados de los cambios introducidos.