Las habilidades más demandadas en un directivo por los reclutadores

Las habilidades directivas se pueden dividir en dos vertientes. Por un lado, las relacionadas con el conocimiento del negocio y la visión estratégica; y por otro lado, todas aquellas aptitudes basadas en el liderazgo de personas, comunicación o estrategias de negociación, entre otras.

En la actualidad, la capacidad de adaptación al cambio es una de las competencias que más se le exigen a un directivo. Dentro del mercado laboral de los últimos años, los perfiles con mayor capacidad para gestionar los contratiempos o las transformaciones de las compañías, son los más valorados en un proceso de selección. Y la tendencia continúa al alza para los próximos años.

Otra de las vertientes de esta adaptación al cambio que consultoras como 360 Talent están viendo crecer en demanda es la movilidad geográfica. Cada vez son más las empresas que solicitan que el candidato esté dispuesto a cambiar su lugar de residencia por otro que resulte más ventajoso para la compañía.

Además, ser capaz de mantener una comunicación asertiva se ha ido convirtiendo con el tiempo en una habilidad imprescindible. El directivo se posiciona mejor en el proceso de selección si puede proporcionar una interlocución constante, si sabe escuchar y cooperar con los demás miembros del equipo, y si se caracteriza por transmitir seguridad y autoconfianza. En este tipo de habilidades entra en juego también la capacidad para empatizar con los demás.

En cambio, las habilidades de liderazgo, control, supervisión y orientación mantienen su valor a lo largo de los años. Todas ellas son algunas de las ventajas competitivas clásicas que caracterizan al perfil del directivo más buscando por las empresas.