16/04/2019 · A falta de unos días para el arranque de la Semana Santa, son muchas las empresas que ultiman los preparativos para las vacaciones de una parte o la totalidad de la plantilla de trabajo. Y aunque estos días de descanso y desconexión suelen ser un revulsivo para la motivación de los profesionales, en lugar de un lastre debido a su brevedad, es importante marcar unas pautas de trabajo, en el caso de que la empresa vaya a seguir estando operativa en ese tiempo.
A diferencia de lo que sucede en otras épocas como las vacaciones de verano, la Semana Santa puede ser una oportunidad para que los trabajadores se tomen un respiro de la rutina laboral, recarguen energías y liberen un parte de ese estrés que pueden haber acumulado a lo largo de los meses previos a esta pausa laboral.
En este sentido, desde Up SPAIN, empresa especializada en la gestión de beneficios sociales, explican que este tipo de desconexiones breves no requieren de un periodo de readaptación al trabajo, que es posterior a la incorporación a la oficina. De hecho, los expertos destacan que supone una oportunidad de librarse del conocido ‘síndrome del Burn out’, un tipo de estrés laboral que experimentan las personas en forma de agotamiento físico, emocional o mental que tiene consecuencias en la autoestima, que se caracteriza por una pérdida del interés por el trabajo y del sentido de la responsabilidad que pueden llegar a derivar en una bajada de la productividad, de la eficiencia y, en última instancia, incluso, en una baja laboral.
Sin embargo, no todas las empresas echar el cierre en estas fechas. Es el caso de aquellas compañías que operan en sectores cuya actividad se concentra en las estas épocas vacacionales, como el caso del sector servicios, e-commerce, hostelería, turismo y o restauranción etc., que no solo ven incrementar la demanda de sus servicios, sino que elevan sus necesidades de incorporar nuevo talento temporal a la plantilla, cuyos contratos –según ha revelado recientemente en un estudio InfoJobs- pueden llegar a alargarse hasta el verano.
Es por ello que, según Up SPAIN, es vital que estas compañías tengan activados protocolos especiales para la atracción de esos perfiles claves que buscan incorporar de forma rápida y casi inmediata que, en base a los datos del estudio InfoJobs, suelen ser profesionales con experiencia previa en el sector o en un puesto similar, con idiomas, un perfil resolutivo, orientado al cliente y o a las ventas.
En este sentido, es clave generar una buena imagen en estos candidatos, dándoles a conocer algunos de los beneficios que la compañía proporciona a sus empleados, aunque estos vayan a permanecer por tiempo limitado en la organización. Solo así la marca empleadora será transmitida a otras personas desde una perspectiva positiva, repercutiendo a largo plazo en la capacidad que la organización tendrá para atraer a nuevos profesionales en el futuro.
No obstante, también hay otro grupo de compañías que, en esta época, optan por un reparto de los días libres, dejando así operativa a una parte de la plantilla, especialmente ahora que los clientes se han vuelto cada vez más exigentes y la competencia en el mercado ha aumentado con la llegada de muchas pequeñas y nuevas empresas, comúnmente conocidas como startups.
En este caso, debido al descenso de su actividad comercial, estas organizaciones no necesitan elevar el número de profesionales, ni que toda la plantilla esté activa en estos periodos, aunque también requieren de la puesta en marcha de una serie de acciones que permitan a los que se marchan, especialmente si ocupan puestos directivos, desconectar de forma eficiente.
Para ello, desde Up SPAIN han publicado una serie de consejos destinados a hacer que estas pausas o periodos vacacionales breves sean efectivos y, como explicaban los expertos anteriormente, se eliminen los efectos negativos del ‘síndrome del Burn out’.