20/12/2019 · Coca-Cola es una de las marcas más conocidas del planeta, y no solo por los consumidores, sino también en el mercado laboral, donde apuestan por transmitir sus valores para acercarse al talento que necesitan para seguir creciendo ya que tienen muy claro que sus estudiantes en prácticas de hoy serán sus líderes del mañana, tal y como asegura Marta Muñoz, directora de Recursos Humanos de Coca-Cola Iberia, con la que hemos mantenido una conversación desde Equipos&Talento.
“Concebimos nuestra propuesta de valor hacia los empleados como un viaje que empieza antes de que la persona llegue a Coca-Cola y que continúa cuando sale, no perdiendo nunca el vínculo con nuestros alumni”, explica Marta Muñoz, quien añade que “la formación continua y las garantías de carrera profesional son clave a la hora de elegir un empleo para los universitarios españoles. Por eso, a lo largo de este viaje Coca-Cola invierte de manera constante en el crecimiento de sus empleados, facilitándoles herramientas con las que puedan dar lo mejor de sí mismos, como garantía de éxito para el futuro. Esto dibuja una empresa con una característica propia: nuestros líderes de mañana son nuestros estudiantes en prácticas de hoy. Una muestra de ello es que el 90 % de nuestros puestos directivos se cubren con promoción interna”.
Coca-Cola en España es ya la octava marca más atractiva para trabajar en el ránking de Merco Talento, algo que emana de la concepción que tienen del empleado “como impulsor del cambio” y centro de su estrategia, aunque Muñoz reconoce que: “Como marca que evoca valores, sensaciones y emociones que a todos nos gustan y con las que nos sentimos identificados, suponen un gran atractivo”, pero es también una enorme responsabilidad de cara a la satisfacción de las expectativas. Por eso, apuestan por impulsar el talento en todos los ámbitos y por fomentar “la igualdad, la inclusión, la diversidad cultural, demográfica, eliminar prejuicios y proteger a grupos menos favorecidos, compromisos todos ellos en el ADN de Coca-Cola”. “Solo así hemos podido llegar a ser concebidos como una organización atractiva para trabajar y que aporta a la sociedad algo más que bebidas”, asegura la directora de RRHH para Iberia.
En este sentido, todas sus medidas están orientadas a seguir poniendo a los empleados en el centro y a que puedan continuar dando testimonio de “ese orgullo de pertenencia que caracteriza a la plantilla”. Para que esto sea posible, en Coca-Cola fomentan la diversidad y la igualdad de oportunidades con planes de carrera individuales y herramientas que permitan la conciliación de vida personal y laboral. Además, apuestan por la formación continua de los empleados, quienes también valoran muy positivamente la oferta de programas de bienestar y salud.
Y es que lograr una percepción positiva como empleador solamente es posible si la experiencia de los miembros que integran la plantilla es satisfactoria y cumple con sus expectativas profesionales y personales, destaca Muñoz, y en el caso de esta compañía están orgullosos de que la mayoría de sus empleados tienen un orgullo de pertenencia prácticamente desde antes de entrar a trabajar. “Independientemente de la edad con la que pasan a formar parte de la compañía, han crecido con la marca y forma parte de su vida, y eso es algo que valoran desde el principio. Existe un vínculo muy especial con la marca que se refuerza durante su viaje con nosotros y que repercute después en la imagen que se proyecta de nosotros como empleadores”.
Y lo son realmente gracias al programa “Ambassador”, cuya finalidad es que todos los empleados vivan en primera persona los valores de Coca-Cola y sean después los prescriptores. “Esto es clave en un momento histórico como el que estamos viviendo de evolución hacia una compañía total de bebidas. Llevar a cabo esta estrategia y hacerlo con el éxito con el que lo estamos haciendo solo es posible gracias al talento interno que forma Coca-Cola”, subraya Muñoz.