28/10/2020 · Según los datos de la última Encuesta de Población Activa del Instituto Nacional de Estadística, correspondientes al tercer trimestre de 2020, y que abarca casi por completo la temporada de verano, en el tercer trimestre del año hubo 19,18 millones de ocupados en España. Son 697.400 ocupados menos que un año antes (-3,5%), cosa que ha reducido significativamente la caída interanual de empleo, que en el trimestre anterior fue de 1,2 millones (-6%), con 569.700 empleos en el trimestre.
Además, el número de parados registrados es de 3.722.000 a finales de septiembre, el mayor número desde marzo de 2018 (subida interanual de 580.500 personas; +15,8%). Es la mayor subida porcentual del paro desde septiembre de 2012. Por segundo trimestre consecutivo, aumentó el número de parados, lo que no ocurría desde 2013.
Esta subida en el desempleo se concentró entre los menores de 40 años y fue mayor en el caso masculino que en el femenino. Pese a la caída generalizada en la ocupación, el número de parados solo subió en once autonomías, con Baleares mostrando la subida mayor (+75,9% interanual).
Por otro lado, la tasa de paro subió hasta el 16,3%, 2,3 puntos porcentuales más alta que hace un año. La proporción de parados subió para ambos sexos y más fuertemente entre los menores de 40 años. Esta cifra de desempleo creció en todas las autonomías, excepto en Asturias.
Por contra, las tasas más altas corresponden a Canarias (25%) y Andalucía (23,8%), mientras que las más reducidas son las de Navarra (10%) y País Vasco (10,3%).
En términos interanuales, la caída del empleo fue generalizada: cayó para ambos sexos, tanto para españoles como para inmigrantes. También bajó el número de ocupados en los cuatro principales sectores económicos: Industria, Servicios, Agricultura y ganadería y Construcción.
Desagregando la información se encuentra que en la Hostelería la ocupación disminuyó un 19,3%, en tanto que aumentó el empleo en tres ramas: Salud y servicios sociales, Administración Pública e Información y comunicaciones.
La reducción del empleo, siempre en términos interanuales, afectó tanto a los autónomos como a los asalariados, aunque en una medida mucho mayor a los temporales (-13%) que a los indefinidos (-0,8%).
Hay dos colectivos que vieron crecer el empleo: uno es el de las personas de 60 y más años de edad (+9,4%); el otro, el de quienes cuentan con educación terciaria (+0,4%).
En este sentido, el trabajo se redujo en todas las autonomías, excepto en la Región de Murcia (+0,1%). Canarias (-8,1%), Baleares (-7,4%) y Aragón (-4,7%) registraron los descensos más marcados.
Para Javier Blasco, director del Adecco Group Institute: “en un trimestre que recoge lo mejor y lo peor de la pandemia, crece levemente la ocupación respecto del trimestre anterior pero también el desempleo. La desescalada inicial agota anticipadamente sus efectos positivos en el empleo a lo largo del trimestre, fruto de los rebrotes y su extensión a todas las CC.AA. y países”.
“El rebrote del número de contagiados por coronavirus, las consecuentes nuevas restricciones al desarrollo normal de la actividad y la expiración del plazo por el cual se prohibió despedir a los beneficiados por ERTE, confluyen en anticipar que las cifras del mercado de trabajo tenderán a empeorar en el último trimestre del año. Así, en el cuarto trimestre de 2020, el número de ocupados bajaría en 842.100 personas con relación a un año antes (-4,2% interanual), quedando en 19,1 millones de trabajadores. La cantidad de parados subiría hasta 3,9 millones (unos 710.000 más que un año antes; +22,3%). La tasa de paro se situaría en un 17%, 3,2 puntos porcentuales por encima del mismo trimestre de 2019, en lo que sería el mayor registro desde junio de 2017”, avanza Blasco.
Para acabar, el experto concluye: “Siendo aún incierto, por el inicio de los confinamientos, el devenir del cuarto trimestre se hace necesario un amplio consenso para tomar medidas que ayuden a superar la difícil situación de empleo y economía, el drama social en definitiva al que asistimos”.